El próximo miércoles, cuando Mauricio Pereyra y su grupo se presenten en el escenario del renovado teatro Comedia, el cantautor de Villa Dolores intentará trasladar a una de las salas más prestigiosa de “la Docta” aquello que puede vivenciarse en infinidad de juntadas y peñas: la música compartida, en estado puro.

“Le he puesto este título, ‘Retratos de patio y luna’, porque quiero asemejar a lo que refiere a una juntada de amigos, espontánea, donde fluye la canción, la poesía. Se trata de compartir, por eso muchos invitados también”, explica el cantautor, que en este caso actuará junto al grupo que completan Iván Buenader (guitarra), Santiago “Oso” Almada (percusión), Pedro Vergara (piano) y Juanchi Fernández (bajo).

“Es la idea de una juntada en un patio, en una trasnoche con un vino de por miedo”, señala luego, como pintando una escena que se nutre una y otra vez con recuerdos (y olvidos) propios.

“Para mí lo primordial es la cercanía con la gente”, explica Pereyra, que se imagina su espectáculo en la sala de la calle Rivadavia como una extensión de lo que propone en sus habituales presentaciones. “Utilizo el humor, los relatos mismos de las canciones, para acercar al público y que se sientan identificados. Me detengo en esas cuestiones y las presento, cuento las historias”.

“Los invitados van a cantar todo repertorio mío. Son todos amigos, queridos y admirados, pero siempre elijo –desde los discos hasta la gente que me acompaña en el escenario– músicos que tengan que ver con mis afectos, que además son grandes artistas. Es la gran dicha que tengo”, dice sobre una lista ilustre que integran Silvia Lallana, Mario Díaz o Juan Iñaki.

“Con Eli (Fernández) y con Martín Mamonde grabé en mi último disco”, apunta Pereyra sobre las colaboraciones incluidas en Ritual de luz (2024), su tercer álbum. También destaca la presencia de Leandro Calle y (Gustavo) “el Negro” Vergara, dos poetas que dejarán su huella a través de la palabra.

“Con todos he compartido en algún momento de invitado de ellos o viceversa. Tenemos un antecedente de querencia, si se quiere. Tenemos guitarreadas compartidas con cada uno, sólo hay que traducirlo al escenario”, anticipa sobre lo que podrá verse este miércoles 24, a partir de las 20.

Salir de la zona de confort

No obstante, para el cantor y compositor chuncano no será un encuentro cancionero más. En rigor, se trata de uno de los conciertos más importantes de su trayectoria porque supone también la posibilidad de realizar una retrospectiva acorde al contexto en el que se presenta.

Sin dudas, un valor agregado si se tiene en cuenta que la amplia mayoría del repertorio pertenece al propio Pereyra, un observador de las cosas simples que se anima a retratar en forma de canción.