La Habana vibró junto a Silvio por Palestina, Cuba, Venezuela y toda América Latina.
Silvio cantó también temas emblemáticos de sus amigos entrañables, no faltaron Créeme, de Vicente Feliú, y Yolanda, de Pablo Milanés.







Silvio hizo la magia en la escalinata de la Universidad de La Habana
» …ser bueno es el único modo de ser dichoso, ser culto es el único modo de ser libre, pero ser próspero es el único modo de ser bueno»… y llovieron los aplausos.
El público, en su mayoría joven, cantó con el trovador de 78 años que con su próxima gira por varios países de Latinoamérica celebra sus 55 años de carrera artística.
Desde las 16:00, hora local, comenzó a llenarse cada espacio de la casi tricentenaria colina universitaria, que resultó pequeña para la cantidad de gente que llegó al lugar para escuchar a su ídolo. También lo hizo el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel.
Por momentos, aquí la nostalgia llega y se va, recorre los escalones hasta el monumento del Alma Mater con sus brazos abiertos, que se erige a la entrada del recinto universitario.
Faltan amistades, algunos, por estos días, transmitieron cómo hubieran querido estar aquí, recordar, cantar junto a Silvio, igual que lo hicieron otras veces en su juventud. El poeta lo recordó en sus palabras de agradecimiento a los que están, a los que no pudieron y a los «ausentes presentes». No faltó la denuncia a la agresión israelí contra el pueblo de Palestina.
Dos horas y 26 canciones de amor y esperanza hicieron de esta noche un momento especial para quienes acudieron a la escalinata universitaria. “Gracias Silvio”, corearon todos al final.
Emily Acosta, recién graduada de la Universidad de las Artes, contó a Prensa Latina que su adolescencia y la vejez de Silvio se superpusieron; por eso nunca pude ir a un concierto suyo.
“Esta será la primera vez que le veré en vivo cantando. Para mí es demasiado grande, porque en él confluyen muchos de los valores que quisiera y busco tener. En cada momento una canción de Silvio ha significado algo diferente. Por eso creo que hoy voy a volver a mí, y al mismo tiempo voy a viajar al sueño de lo que quisiera ser”.
También le pregunto a Amanda Casa, estudiante de Diseño Industrial, qué significa para ella estar aquí: “a los pocos conciertos que he podido ir de Silvio, iba por mis padres a veces sin entender muy bien la insistencia del asunto. Hoy con 19 años estoy aquí por decisión propia, aprendí a valorar ese pedacito de cultura que me inculcaron.
Para la investigadora Dixie Edith Trinquete, escucharlo en vivo es como volver a casa: “No hay canción que no me sepa, no hay acorde que no me emocione. Su discografía es mi playlist diaria, pero verlo ahí, frente a nosotros, en la escalinata de todos los conciertos, será un recuerdo de que la poesía puede reiniciarnos”.
Esther Barroso, realizadora de la Televisión Cubana, calculó que ha acudido al 80 por ciento de sus conciertos. “Y seguiré yendo, pues espero que vengan más. La obra de Silvio me ilumina en medio de tanta oscuridad”.
Juan Antonio, un médico intensivista, dice que por suerte queda un largo “mientras tanto” antes de que esa guitarra vaya a parar al mar. “Estamos con él en este concierto como estamos con él en la vida, en la verdad y en la razón”.
También en el público, la siquiatra Dayne Rivera, confiesa que necesitaba estar aquí. “Es como cargar baterías, como volver a dónde fuiste feliz. Mi generación está cansada, yo estoy cansada, aquí me reencuentro conmigo”.
En opinión de Reynaldo Sanler, cantante del grupo Vocal Sampling, Silvio Rodríguez es el más grande exponente de la canción y representa las inquietudes y aspiraciones de todo un pueblo,
“Vuelve a darnos el mensaje de unión, esperanza y resistencia en la también simbólica escalinata de la Universidad”, comentó Sanler, quien terminó sus palabras con un verso de una de las canciones de Silvio: Solo el amor alumbra lo que perdura.
En el concierto, Silvio estuvo acompañado por Jorge Aragón (piano), Maykel Elizarde (tres), Niurka González (flautas y clarinete), Rachid López (guitarra), Jorge Reyes (contrabajo), Malva Rodríguez (piano y coros), Oliver Valdés (batería y percusión) y Emilio Vega (vibráfono y percusión).
Este recital fue el inicio de la gira que lo llevará con sus músicos a Chile (29 de septiembre, 1, 5 y 6 de octubre), Argentina (11, 12 y 21 de octubre), Uruguay (17 y 18 de octubre), Perú (25 de octubre) y Colombia (31 de octubre y 2 de noviembre).

Fuente: Prensa Latina