Axel Kicillof

Como ocurrió el último 19 de julio con el cierre de listas para la elección provincial, la definición de los candidatos a diputados nacionales del peronismo por la provincia de Buenos Aires volverá a ser traumática. Este domingo vence el plazo para presentar listas para los comicios del próximo 26 de octubre y en Fuerza Patria aún no está definido quién encabezará la nómina, pues la interna del peronismo y las diferencias entre el sector de Cristina Kirchner, el Frente Renovador de Sergio Massa y el Movimiento Derecho al Futuro de Kicillof persisten.

En este marco, mientras que en La Cámpora ponen sobre la mesa de negociación que la ingeniería electoral debería estar a cargo de la expresidenta, Cristina Kirchner, y que el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, tendría que juntarse con la titular del Partido Justicialista nacional para abordar el asunto; en La Plata toman distancia de este plan.

Cerca de Kicillof deslizan que solo pedirán cuatro lugares entre los primeros quince —que es la cantidad de bancas que renueva el peronismo— que son considerados “propios” y que al mandatario le deberían respetar esa presencia. También aseguran que el gobernador no hará vetos de nombres y que tampoco tiene intenciones de que la cabeza de la lista sea a propuesta suya. La cede.

Crecen las dudas de un acuerdo entre el gobernador y Cristina Kirchner

Actualmente, los cuatro lugares considerados propios están representados por el exministro de Salud bonaerense, Daniel Gollán; el ex intendente de Florencio Varela, Julio Pereyra; el titular de la CTA de los Trabajadores, Hugo Yasky y Brenda Vargas Matyi, que responde al intendente de La Matanza, Fernando Espinoza.

El cristinsimo dice que de esos nombres hay dos que “no pasan el filtro”. Se tratan de Pereyra y Vargas Matyi. El primero por haber votado a favor del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), durante la presidencia de Alberto Fernández; una decisión que fue un parteaguas, terminó con la salida de Máximo Kirchner de la jefatura del bloque del peronismo y el inicio de la cruda interna que se desató en el último gobierno peronista hasta el final de su mandato. En tanto que Vargas Maty —que es candidata a concejal en La Matanza- también acompañó el acuerdo con el organismo internacional refrendado en marzo del 2022. En el kirchnerismo endilgan al intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, esa decisión; es decir, que persiste el recelo con el jefe comunal. Cerca de la familia Kirchner recuerdan que Espinoza fue el único intendente que la entonces vicepresidenta recibió en plena campaña en 2023 cuando se preparaba para ir a una PASO en su municipio con Patria Cubría, del Movimiento Evita.

Espinoza con Cristina Kirchner

“No podemos seguir metiendo candidatos que después se dan vuelta”, plantean en La Cámpora. De hecho, en un acto en La Plata, en septiembre del año pasado, Kirchner dijo: “Basta de Sciolis”.

Mientras tanto, en La Plata prefieren evitar hablar de los nombres propios que puede proponer el mandatario bonaerense, aunque según pudo saber Infobae, el gobernador sí pedirá por Gollán y es probable que el nombre del diputado se repita en la lista que terminará conformándose el próximo domingo.

Kicillof quiere que se le respeten los cuatro lugares. Algo que en los cálculos que hacen cerca de la expresidenta no coincide. La ecuación posible del cristinismo es ocho lugares para ellos, cuatro para el Frente Renovador y tres para el espacio del MDF. En el medio hay otros sectores que forman parte de Fuerza Patria.

El ex secretario de Comercio, Guillermo Moreno, y el líder de Patria Grande, Juan Grabois estarán adentro de los casilleros “entrables”. Días atrás, Moreno participó del lanzamiento de la lista a concejales de Fuerza Patria en Hurlingham. Fue un acto que encabezó el presidente del PJ bonaerense, Máximo Kirchner. A Moreno lo hicieron subir al escenario. En tanto que en lo que respecta a Grabois —que no firmó la inclusión a la alianza electoral y tensionará hasta bien entrado el domingo— dan por descontado que formará parte de esa lista. Solo si Massa es quien encabeza podría complicarse la inclusión de Grabois. Órbita allí la figura de Cristina Kirchner como “garante” de paz. Días atrás y por separado, Massa y Grabois se acercaron hasta San José 1111 donde la expresidenta transita su prisión domiciliaria en el marco de la causa Vialidad.

Máximo Kirchner con Guillermo Moreno en Hurlingham

En los últimos días, volvió a activarse una especie de operativo clamor —de los propios— para que Máximo Kirchner sea quien encabece la lista. Como contó Infobae, el titular del PJ bonaerense no rechaza el convite, pero por estas mide el camino a seguir y consulta a distintas personas qué harían en su lugar. Hay algunos factores que pone sobre la mesa el jefe de La Cámpora. Quienes lo rodean creen que la interna del peronismo y el resultado de la elección desdoblada del próximo 7 de septiembre socavará la campaña hacia el 26 de octubre. Hay cierta sospecha de que los intendentes de peso que forman parte del MDF no moverán su estructura hacia la elección de octubre si Kirchner es el primer candidato. Para bajarle dramatismo, en el entorno de Kicillof aseguran que “sin septiembre no hay octubre” y que el gobernador “militará” de la misma manera ambas elecciones.

Este miércoles, el intendente de Exaltación de la Cruz y primer candidato a diputado provincial por la Segunda sección electoral de Fuerza Patria, Diego Nanni, planteó que “la candidatura de Máximo Kirchner hay que discutirla”.

“Soy intendente, me gusta el candidato ejecutivo, con experiencia, que tenga sensibilidad, roce con la gente, que sepa realmente de lo que estamos hablando para encarar un proyecto de acá para adelante”, agregó en declaraciones a Radio Mitre. La figura de un intendente también sobrevuela en la danza de nombres de eventuales candidatos para el peronismo.

Sin embargo, en lo que respecta a un eventual encuentro entre CFK y Kicillof, en la capital bonaerense aseguran que “nadie lo invitó ni lo llamó” al gobernador para ninguna reunión; pero que, de darse, asistiría como ocurrió con un resultado ambiguo durante el proceso de cierre de listas para la elección provincial del próximo 7 de septiembre.