Así es el muro que protege de las balaceras al Jardín de Infantes Nº 426 Huellitas Sureñas de Comodoro Rivadavia (Foto: gentileza La Mañana de Neuquén)

Ante los reiterados hechos de violencia e inseguridad frente al Jardín de Infantes Nº 426 Huellitas Sureñas de Comodoro Rivadavia, que desataron tiroteos en la puerta de la institución, tanto las autoridades como la comunidad educativa le reclamaron al gobierno provincial que tomara medidas de seguridad para proteger a los alumnos.

El hecho que hizo preocupar y enfurecer a los directivos y los padres ocurrió en agosto del 2023. Era la tercera vez que sucedía en el año, por lo que reclamaron custodia permanente para evitar una tragedia.

Si bien en un principio se designó a un efectivo policial para custodiar a los alumnos en horario escolar, la falta de personal hizo que se tomaran otras medidas. La solución fue comprometerse a construir un muro sobre la calle Los Naranjos y colocar cámaras de seguridad en el establecimiento escolar.

A dos años del reclamo, el muro de concreto de 150 m2 que rodea al jardín de infantes es una realidad y fue erigido como barrera de protección frente a los reiterados tiroteos que pusieron en peligro a alumnos, docentes y trabajadores del establecimiento en el barrio San Martín, una de las zonas más conflictivas de la ciudad petrolera.

La balacera ocurrida en 2023 fue la que desató el reclamo de la construcción del muro (Foto: gentileza Diario Crónica de Comodoro Rivadavia)

En el último incidente que motivó la decisión, los niños y personal escolar entraron en estado de pánico al escuchar los disparos y tuvieron que tirarse al suelo para evitar verse alcanzados por posibles disparos.

En aquella oportunidad, la situación escaló hasta el punto que policías debieron escoltar al personal que permanecía en el edificio una vez finalizada la jornada.

De acuerdo con los testimonios, en los tres meses previos a agosto de 2023, se registraron al menos tres ocasiones en las que el Jardín de Infantes Nº 426 quedó literalmente en la línea de fuego de enfrentamientos armados en las calles aledañas. En una de ellas, las balas impactaron la pared del establecimiento y también el automóvil de una docente estacionado frente al edificio.

“En uno de los episodios, los chicos ya se habían ido, pero en otras situaciones anteriores estaban en el jardín y tuvieron que protegerse bajo las mesas”, relataron fuentes institucionales. El material del edificio, compuesto en parte por chapas, incrementaba la preocupación entre las familias, que explicaron que una bala perdida podría atravesar fácilmente las paredes.

En agosto de 2023, los padres había cortado la calle del jardín para reclamar medidas de seguridad para sus hijos (Foto: gentileza Diario Crónica de Comodoro Rivadavia)

Ante esa presión, el Gobierno de Chubut resolvió suspender las clases de manera preventiva y, a partir de entonces, ejecutar la construcción de un muro protector que rodeara la institución.

Según informó el Ejecutivo provincial, la obra debía llevarse a cabo en aproximadamente 45 días. Sin embargo, la finalización del muro se extendió mucho más allá del plazo prometido: el anuncio de la culminación de los trabajos llegó dos años después del comienzo del proyecto, el pasado lunes.

A través de la Secretaría de Infraestructura, Energía y Planificación, el Gobierno comunicó el cierre de las tareas, que comprendieron no solo la edificación del muro de concreto, sino también la instalación de iluminación, reparación de cubiertas de techos y mamposterías exteriores, así como la provisión y colocación de un barral antipánico doble con cerradura en la puerta de acceso y la colocación de un nuevo portón doble hoja.

Con la obra, las familias alcanzaron una respuesta concreta a una demanda de larga data. “Rápidamente las familias se organizaron para expresar la solicitud de un muro perimetral que, al menos, les diera cierta tranquilidad al dejar a sus hijos en el Jardín”, expresaron representantes de la Asociación de Padres y Madres.

Comodoro Rivadavia, cabecera del departamento Escalante y eje de la producción petrolera de Chubut, enfrenta desde hace años una compleja problemática de criminalidad en algunos barrios periféricos, donde la convivencia diaria se ve impactada por hechos de violencia armada

El nuevo muro construido alrededor del edificio busca proporcionar una barrera física que minimice los riesgos ante eventuales balaceras en las inmediaciones, con el propósito de ofrecer un entorno más seguro para los 120 niños inscriptos este ciclo lectivo.

Tras dos años de incertidumbre, el regreso de las vacaciones de invierno encuentra a la comunidad escolar en un edificio reforzado, aunque la problemática de fondo acerca de la seguridad en el barrio San Martín persiste.