La Justicia de Mercedes declaró culpable este martes al único imputado por el crimen de Lucía Mujica ocurrido en 2022, en un departamento de la localidad bonaerense de San Antonio de Areco. La joven de 24 era pareja de Nahuel Casco, quien deberá cumplir una sentencia a prisión perpetua tras el fallo dictado por el tribunal.
Los jueces Fabián Brahim, Silvia Giumelli y Martín Révora lo hallaron culpable de homicidio agravado por ensañamiento y violencia de género, tras haberse comprobado que el agresor —de la misma edad y con quien Mujica mantenía una relación desde hacía dos años— golpeó brutalmente a Mujica provocándole lesiones cortantes. Así lo indicó el portal Días de Areco.
Luego de la feroz golpiza, prendió fuego la vivienda en donde convivían con la intención de eliminar evidencia y simular el hecho como un accidente. “Se sabe que hubo una pelea, que el acusado la mató y que intentó hacer pasar todo por un accidente doméstico, algo que no sucedió“, narraron fuentes del caso.
Los hechos que llevaron a juicio a Casco ocurrieron la madrugada del 13 de noviembre de 2022. La autopsia realizada sobre el cuerpo de la joven determinó que murió como consecuencia de un paro cardiaco, traumatismo de cráneo y hemorragia cerebral, además de presentar graves quemaduras.
Durante el proceso, la defensa del acusado solicitó una reducción de la pena a 20 años, pero su planteo fue rechazado en virtud de la gravedad del caso y de las pruebas presentadas.
La acusación sostenida por el fiscal Adrián Landini fue debidamente fundada. El Tribunal Oral en lo Criminal N°4 del Departamento Judicial de Mercedes resolvió por unanimidad atribuir la máxima pena prevista por el Código Penal debido al ensañamiento demostrado y a la aplicación de violencia de género en el ataque.
Las audiencias incluyeron testimonios de familiares, peritos y efectivos policiales que participaron en las primeras actuaciones. Durante el juicio, el acusado no brindó declaraciones ni tampoco se presentó en la lectura del veredicto, solo pidió disculpas mirando al piso durante la fase de alegatos, pero evitó dar explicaciones sobre el crimen.
Por su parte, la madre de la víctima manifestó a medios locales su conformidad con la condena dictada: “Siento que por fin podemos empezar a hacer el duelo”, expresó. Aunque lamentó la postura del joven. “Nunca contó por qué lo hizo. Y por más que yo le dé vueltas y lo hable cinco millones de veces con la psicóloga, es posible que nunca lo sepa”, dijo.
“Es difícil meterse en la mente de un psicópata. La pudo haber matado porque ella le dijo que no quería estar más con él, o le pidió que dejara de jugar a los jueguitos, o porque pasó una mosca volando. Cualquiera pudo haber sido el detonante”, relató.
Ángeles, tía de la joven, valoró el fallo del tribunal y consideró que la condena permite a la familia avanzar en el proceso de despedida: “La condena es un alivio en medio de tanto dolor. Creo que, a partir de hoy, Luci va a poder descansar en paz”, indicaron a TN.
Femicidio en Quilmes
Un nuevo femicidio fue reportado este domingo en la localidad bonaerense de Quilmes, en la zona de Villa Luján. El hecho ocurrió en una vivienda ubicada en la intersección de las calles Mozart y Güiraldes, donde una mujer de 37 años fue hallada muerta tras un presunto ataque perpetrado por su pareja, un hombre de 67 años que permanece bajo arresto mientras avanzan las investigaciones judiciales.
El episodio se conoció luego de un llamado telefónico que alertó sobre una situación de violencia en el domicilio. Al llegar, efectivos del Comando de Patrullas de Quilmes hallaron a la víctima, identificada como Beatriz Mónica Espinoza, tendida en el suelo. Personal médico del Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME) confirmó el fallecimiento en el lugar.
En el interior de la vivienda se encontraba la pareja de Espinoza, señalada como principal sospechosa. El detenido relató que la mujer habría entrado en la casa con un arma blanca e intentado agredirlo, por lo que él tomó una maza y la golpeó en la cabeza y el cuerpo. Los oficiales incautaron en la escena un cuchillo con manchas de sangre sobre una cama y una maza en el piso, ambos elementos relevantes para la investigación.
La causa quedó a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N° 7 del Departamento Judicial, encabezada por la fiscal Mariana Santoro.