Continúa la investigación por la muerte de Camilo Nuin, un futbolista de 18 años que se desempeñaba en la Reserva de San Telmo y falleció mientras era sometido a una operación de rodilla en una clínica de zona sur. Tras los resultados preliminares de la autopsia, y a la espera del informe anatomo-patológico y la pericia toxicológica, esta semana serán las primeras testimoniales y luego la Asesoría Pericial determinará si hubo o no mala praxis.
Al día siguiente del deceso, por disposición del fiscal, se le realizó la autopsia al cuerpo del juvenil y sus resultados, tantos los del informe preliminar como los de las pruebas complementarias, serán clave en la caso para determinar cuál fue la causa de muerte y si hubo responsables o no, tal como adelantaron fuentes cercanas a la investigación a Infobae.
El resultado preliminar de la autopsia que se le practicó al cuerpo del deportista indicó que el fallecimiento del joven fue producto de un paro cardíaco que se dio en el momento en el que le estaban realizando la intervención quirúrgica en la rodilla a raíz de una rotura de ligamento. Sin embargo, aún resta continuar con el análisis de las muestras a fin de determinar las razones de ese infarto.
Ahora, la causa por la muerte de Camilo Nuin suma nuevas diligencias en la investigación judicial.
Esta semana están previstas las declaraciones testimoniales, que incluirán al personal médico involucrado y a familiares del futbolista.
El expediente continúa bajo análisis y se mantiene a la espera de dos informes clave: el anatomo-patológico, que permitirá establecer detalles sobre las causas específicas del fallecimiento, y la pericia toxicológica, destinada a descartar la presencia de sustancias que puedan haber influido en el desenlace.
Finalizados estos estudios, la Asesoría Pericial actuará para determinar si existieron irregularidades en la atención médica, y en caso de confirmarse una mala praxis, en qué instancia de la cadena de atención pudo haberse producido.
Recién entonces se definirá si corresponde imputar penalmente a alguno de los profesionales intervinientes. El club y la familia permanecen a la espera de avances concretos en la causa.
El relato del padre
Mientras espera por los resultados para definir si se trató de un caso de presunta mala praxis, el padre de Camilo Nuin recordó cómo fueron las horas previas a la cirugía y el desgarrador momento en que se enteró de la muerte de su hijo.
“Él venía por una cirugía de rodilla, tenía rotos los ligamentos cruzados, una cirugía programada con un cirujano con el cual él se había comunicado varias veces y le tenía mucha confianza. Y vinimos acá, nos despertamos lo más bien, hablamos del partido del Mundial de Clubes, vinimos en el auto riéndonos”, comenzó su relato.
Y agregó: “Nos reímos poniéndole la bata para entrar al quirófano porque se la había puesto al revés, le contábamos anécdotas de cuando era chico”.
Aproximadamente una hora después del inicio de la intervención, el padre recibió la primera señal de alarma. “A la hora y pico me dicen que se complicó, que lo están reanimando. Yo no entendía, porque cómo se va a complicar, ¿estás reanimando a una persona que se está operando de la rodilla? Y automáticamente sale otro de adentro y me dice ‘se murió’”, recordó el padre del joven futbolista.
La familia busca respuestas sobre lo ocurrido durante la intervención. El padre relató que el cirujano fue el único profesional que se acercó a hablar con ellos tras el fallecimiento de Camilo. Según su testimonio, el médico explicó que la complicación surgió en el momento en que se extraía el segundo injerto para reemplazar los ligamentos.
“El cirujano fue el único que habló con nosotros, nos dijo que cuando estaba sacando el segundo injerto para reemplazar los ligamentos le dijeron ‘pará, pará, pará que entró en paro’, no entiende bien por qué, aparentemente, por lo que se rumorea, habrá sido un error del anestesista, de la aplicación de la anestesia, yo no lo puedo certificar eso hasta después de la autopsia”, sostuvo.
Por eso, afirmó que continuará con el pedido de justicia porque “yo creo que fue mala praxis, no tengo la certeza porque no se hizo la autopsia, pero estoy convencido de eso”, reafirmó.