A dos semanas de la muerte de Ariel Javier Pirollo, ocurrida en un violento accidente de tránsito sobre la Ruta 2, la familia de la víctima pidió agravar la imputación contra el ciudadano chino que manejó borracho y a contramano durante 17 kilómetros.
La víctima, de 34 años, circulaba en su Volkswagen Gol en sentido a Mar del Plata cuando fue embestida de manera frontal por el vehículo de Y.S., un ciudadano de origen chino domiciliado en Florencio Varela.
El hecho, que se produjo a las 6:45 del 25 de mayo. El conductor manejaba a contramano, en estado de ebriedad y superando los 100 km/h. Tras el siniestro fatal, el hombre quedó imputado por “homicidio culposo”.
Sin embargo, la familia de Pirollo, acompañada por los abogados Gonzalo Escaray y Daiana Monzón, sostiene que la conducta del imputado no debe ser encuadrada como una simple imprudencia, sino como un hecho criminal, dada la gravedad de las circunstancias y el desprecio por la vida demostrado antes y durante el siniestro, según informó el portal de Noticias Argentinas.
Según la descripción de los hechos, Y.S. conducía su BMW totalmente en contramano, pese a las advertencias de choferes y pasajeros de un colectivo que circulaba en sentido opuesto. Testigos aseguraron que le tocaron bocina insistentemente y hasta le gritaron para advertirle el peligro, pero el conductor no frenó ni intentó cambiar de sentido. Esa actitud quedó respaldada por imágenes aportadas por la empresa AUBASA.
El test de alcoholemia realizado minutos después del choque arrojó un resultado de 1,35 gramos de alcohol por litro de sangre, valor significativamente superior al permitido por la legislación argentina.
La pericia oficial, incorporada al expediente, señaló que no existieron maniobras evasivas por parte del conductor del BMW. En cambio, el Volkswagen Gol de la víctima sí intentó frenar, dejando una huella de 18 metros en el asfalto. Por esto mismo, el informe apunta directamente contra el ciudadano chino al considerarlo el causante directo y activo del siniestro.
A partir de estos elementos, los abogados solicitaron a la Unidad Funcional de Instrucción N°7 de Berazategui la recalificación de la causa, pasando de “homicidio culposo” a “homicidio simple con dolo eventual”. De prosperar este pedido, podría recaer sobre el ciudadano chino una pena de entre 8 y 25 años de cárcel, en contraposición a los montos menores previstos para la figura culposa.
Para los profesionales que actúan en el expediente, tal como surge de la prueba testimonial y pericial, “el imputado se representó como probable el resultado muerte y aún así continuó su conducción, asumiendo el riesgo de que el desenlace fatal ocurriera”. La familia de Pirollo insiste en la responsabilidad dolosa y en la necesidad de que se establezca un precedente. “Que este hecho no se reduzca a mera negligencia o temeridad, ya que se trató de una conducta dolosa y evitable”, remarcaron Escaray y Monzón.
La causa sigue avanzando en su etapa de instrucción, en manos de la UFI 7 de Berazategui, cuyos funcionarios estudian el pedido de agravamiento del delito para el imputado Y.S.
Pirollo era padre de un niño de a penas 1 año y dueño de un local de venta de productos de limpieza al por mayor y menor. “Siempre estaba de buen humor y te salía con un chiste en cualquier momento”, confió Fernando, uno de sus socios y mejores amigos, en diálogo con Infobae tras la muerte del hombre.
Con un pasado de joven como bombero voluntario, Ariel aprovechó la apertura de su local para ayudar a los más necesitados durante la pandemia del COVID-19, entre ellos el cuartel de Bomberos Voluntarios de Florencio Varela. “Era ex bombero y colaboramos siempre con distintos cuarteles. Desde la cuarentena, quedamos aportando donaciones a muchos lugares”, contó Fernando durante la entrevista con este medio.
El gran aporte de Ariel a la causa de los brigadistas fue reconocido por los propios Bomberos Voluntarios de Florencio Varela, que tras su fallecimiento compartieron un conmovedor posteo en sus redes sociales. “Deseamos un eterno descanso y nuestras condolencias a toda la familia y amigos del Sr. Ariel Pirollo, quien siempre junto a sus socios ha colaborado activamente con nuestra institución con la donación de insumos del negocio “Barto Limpieza” de la localidad de Ingeniero Allan. Un fuerte abrazo para sus socios, familiares y amigos», reza el mensaje.
