Un nuevo estudio realizado por investigadores de la Universidad de Yale y del Hospital Brigham de Massachusetts, en colaboración con la Facultad de Medicina de Harvard, ha confirmado que el uso de inteligencia artificial (IA) en la colonoscopia aumenta de manera significativa la detección de pólipos y adenomas, formaciones que pueden llegar a convertirse en cáncer si no se identifican y tratan a tiempo. Los resultados de esta investigación han sido publicados en la prestigiosa revista médica Annals of Internal Medicine y se basan en una revisión sistemática de ensayos clínicos aleatorizados que compararon la colonoscopia convencional con una versión mejorada mediante un sistema de detección asistida por IA, conocido como CADe.
La colonoscopia es un procedimiento esencial para la detección temprana del cáncer colorrectal, una de las principales causas de muerte por cáncer en el mundo. Sin embargo, algunos pólipos y adenomas pueden ser difíciles de detectar, especialmente aquellos que son planos o pequeños. Los sistemas CADe, basados en inteligencia artificial, utilizan algoritmos avanzados de aprendizaje automático que analizan las imágenes en tiempo real durante el procedimiento, permitiendo identificar con mayor precisión y rapidez cualquier anomalía en el colon. Esto ayuda a los especialistas a no pasar por alto lesiones que podrían ser precursores de cáncer.
De acuerdo con los investigadores, la IA ha demostrado ser especialmente eficaz en la detección de lesiones que podrían pasar desapercibidas a simple vista, aumentando de manera notable la tasa de detección de pólipos y adenomas en comparación con los métodos tradicionales. Al mejorar la precisión de las colonoscopias, los sistemas asistidos por IA no solo pueden ayudar a prevenir el cáncer colorrectal, sino también reducir el número de procedimientos repetidos y minimizar la carga de enfermedades en la población.