Padres y alumnos del Instituto Provincial de Educación Media (IPEM) Nº 198 Martín Ferreyra, ubicado en la zona sur de la ciudad de Córdoba, realizaron una protesta hoy a la mañana en las puertas del establecimiento, con motivo de los reiterados casos de bullying que viene sufriendo una estudiante de 13 años en los últimos meses, ante una llamativa pasividad de las autoridades.
La grave situación reportada en el centro educativo ubicado en Joaquín Camaño y Bazán, en el barrio Poeta Lugones de la capital provincial, salió a la luz en las últimas horas, a partir de los videos que algunos estudiantes compartieron en las redes sociales. Las imágenes en cuestión muestran la pesadilla de la que es víctima una alumna de 2° año, quien sufre agresiones físicas y todo tipo de burlas a diario.
“Se descubrió que un grupo de estudiantes del IPEM estuvieron haciendo bullying por bastantes meses a un grupo de chicos de 2° y 3° año con un grado de discapacidad”, explicó R., estudiante de 6° año del IPEM N° 198, en diálogo con Cba24n.
Junto a un compañero, el adolescente advirtió que estas agresiones ocurren “desde principios de año”, y al mismo tiempo denunció que “todos los directivos saben y nadie hace nada”.
“Subieron videos de una chica en forma de burla, mostrando cómo se la arrastraba por el piso, se la tiraba, se la levantaba, le arrojaban cosas. La bullyneaban tanto al punto que a la chica se la veía llorando y todo el grupo de alrededor suyo se cagaba de risa”, describió una de las grabaciones.
De hecho, la filmación que encabeza esta nota da cuenta del drama que vive la víctima. En uno de los pasillos de la escuela, y sin la presencia de docentes, un grupo de alumnas empuja, golpea y se burla de una niña que, indefensa, es sometida a todo tipo de maltratos.
“¡Pegale patadas! Hacela cagar, pegale”, se escucha decir a una de las agresoras en uno de los videos que circularon por las redes. Y no conforme, exclama: “¡Tirale de los pelos!”.
Otro de los videos expone el momento en el que una de las agresoras le exige a la víctima que se ponga una bolsa de nylon en la cabeza y baile para la cámara. “Perreá, amiga, perreá. Perreá la concha de tu madre”, dice con desprecio.
Durante la entrevista con el citado medio cordobés, R. señaló que otros alumnos también son víctimas de casos de bullying, pero explicó que hasta la aparición de las recientes imágenes “sólo lo sabía un círculo muy cerrado”.
“Ahora que salió todo a la luz, los padres se preocuparon mucho más y organizaron esta protesta del turno mañana”, contó. Luego, confirmó que el alumnado del turno tarde y algunos de sus padres repetirían una manifestación similar en horas del mediodía: “Sentada en la puerta y nadie va a entrar”.
Consultado por su opinión sobre el bullying, el alumno que cursa el último año del secundario reconoció que él también fue víctima de burlas y destratos cuando era más pequeño. “Yo sufrí bullying y es algo que te genera impotencia, inseguridad, una incapacidad de hacer algo contra esa persona”, lamentó.
“Esto después te genera problemas hacia vos y cómo te ves. Y más para esta gente que tiene un grado de discapacidad, que todo es muy distinto para ellos”, concluyó con la voz quebrada.
