Desde que llegó hasta que se fue pasaron 40 segundos, 40 segundos en los que debería haberse llevado a sus dos hijos, a los que había ido a buscar a la casa de su ex en la localidad de González Catán. Sin embargo, frente a la niña de 10 años eligió discutir con el actual novio de la mamá de la nena y resolver la disputa a los tiros. Mejor dicho, ejecutar a su contrincante. No fue uno, fueron seis los disparos que se escucharon en la noche para terminar con la vida de Brian Enrique Carabajal, de sólo 28 años. Después escapó en su moto y, desde entonces, era intensamente buscado. Se entregó este domingo.

La situación ya venía tensa. Al menos eso fue lo que contaron los testigos del crimen a las autoridades. “El asesino había ido un par de veces al barrio, ya la había amenazado, ya venía antes del tema”, contaron fuentes del caso a Infobae.

La causa la investiga el fiscal Carlos Adrián Arribas de la UFI de Homicidios de La Matanza, como homicidio agravado por el uso de arma y en las próximas horas indagará al ahora detenido, que se presentó esta tarde en una comisaría de González Catán.

El crimen de Carabajal ocurrió este viernes minutos antes de las 22.30 y una cámara de seguridad grabó cómo llegó el homicida, las detonaciones de los seis disparos y la fuga del sospechoso de Ariel César Collante (31), quien eligió ir armado a la casa de su ex a buscar a su hija. Tenía encima un arma calibre .380.

Esa noche, Collante fue a la casa de su ex, ubicada en el cruce de Celestino Vidal y Céspedes, en el partido de La Matanza. Llegó con su moto. Bajó del vehículo y entró a la propiedad en búsqueda de sus dos hijos. “La nena fue testigo presencial. Tiene 10 años y pasó todo adelante de ella“, agregaron las fuentes consultadas por este medio.

El acusado de homicidio se entregó este domingo

Ya dentro de la casa de su ex, el ahora prófugo comenzó a discutir con la actual pareja de la madre de sus dos hijos. En ese momento, la mujer no estaba en su propiedad. La disputa siguió en la calle. Y fue ahí donde Collante sacó el arma y empezó a los tiros. Disparó una vez, pasaron cinco segundos y volvió a gatillar en otras cinco oportunidades. Y escapó en la moto.

Fue el suegro de la víctima el que dio aviso a la Policía Bonaerense y al lugar llegaron los agentes de la Comisaría 2ª Sur de González Catán. Cuando arribaron, los agentes se encontraron con Carabajal tendido sobre el asfalto y con una herida de arma de fuego a la altura de uno de sus hombros. Los testigos sindicaron a Collante como el autor del crimen.

Cuando llegaron los médicos al lugar del hecho constataron que la víctima había muerto, por lo que se iniciaron actuaciones por homicidio y comenzó el relevamiento de las cámaras de seguridad de la zona.

Uno vecino que vive enfrente de la casa donde ocurrió todo tiene cámaras, pero no captaron el hecho porque funcionaban mal. Sí los policías lograron las imágenes que ilustran esta nota donde se ve la llegada del homicida, se escuchan los tiros y se observa cómo se escapa del lugar.

Los investigadores buscaron este fin de semana a Collante en un par de domicilios que solía frecuentar, pero de antemano sabían que no estaba ahí: “El dato es que no está en esos lugares, pero sirvió para presionarlo y no le quedó otra que entregarse. Fue solo hasta la comisaría», destacaron.