El error en la manipulación del oxígeno expuso al menor a una sustancia peligrosa durante más de tres horas (LM Neuquén)

El caso de León Awkan Rebolledo, un niño de 2 años que inhaló alcohol puro por un error en el Hospital de Loncopué, en la provincia de Neuquén, provocó la denuncia de mala praxis y puso en alerta tanto a la justicia como a las autoridades sanitarias del sur argentino. La familia del menor indicó que el niño superó una situación crítica luego de permanecer más de tres horas expuesto a la sustancia, por lo que el episodio podría haber tenido consecuencias fatales de no ser por la intervención de la pareja de la madre, quien detectó el fuerte olor a alcohol que emanaba la bigotera que le suministraba el oxígeno.

Según relató la mamá, Patricia Barrera, a LM Neuquén, todo comenzó cuando el pequeño presentó fiebre y tos persistente. La familia acudió al Hospital de Loncopué donde, tras los estudios correspondientes, recibió medicamentos y fue dado de alta.

Sin embargo, la situación se agravó durante las siguientes horas: el cuadro incluía baja saturación y obligó a regresar al centro de salud, donde terminó internado. En ese contexto se produjo el error en la manipulación del oxígeno.

Un enfermero conectó de forma incorrecta la sonda para el suministro de oxígeno, sin advertir que el filtro acuático contenía alcohol puro. “Mi hijo estuvo inhalando alcohol puro durante horas”, sostuvo Barrera al medio local. Su pareja advirtió el inusual olor y pidió que la conexión fuese revisada. El personal actuante modificó la sonda, aunque no inspeccionó el recipiente, donde permanecía la sustancia.

Frente a la persistencia del olor, la familia dio aviso a la guardia y exigió atención inmediata. El niño fue derivado de urgencia al Hospital de Zapala, donde finalmente fue estabilizado y logró obtener el alta. “Gracias a Dios, hoy está mejor y ya le dieron el alta”, dijo Barrera.

El episodio no terminó ahí. La madre denunció la situación ante la Justicia. “Esto fue una mala praxis. Ya hicimos la denuncia y está en manos de la justicia”, aseguró.

La Región Sanitaria del Pehuén reconoció el incidente y activó procedimientos para investigar responsabilidades en el hospital (LM Neuquén)

También acudió a los medios para tener visibilidad y reclamar acciones reparadoras y sanciones para los responsables. “Pedimos que de una vez por todas estos hechos nefastos dejen de suceder y que le caiga el peso de la ley a quien le corresponda, porque hoy mi hijo la sacó barata gracias a mi pareja que se dio cuenta, caso contrario mi bebé hoy no estaría conmigo y otra hubiese sido la historia”, remarcó la madre.

Además, se quejó sobre la deficiencia estructural en el sistema sanitario de localidades pequeñas, que juega un rol central en la problemática. Señaló que la falta de médicos especialistas obliga permanentemente a las familias a buscar ayuda en centros asistenciales de otras ciudades. “Puede generar demoras y complicaciones en la atención médica”, contó en diálogo con LM Neuquén.

El reclamo tomó además estado público. La Región Sanitaria del Pehuén, encabezada por el doctor Carlos Quarín, difundió un comunicado donde reconoció el incidente ocurrido en el Hospital de Loncopué durante la atención de un paciente pediátrico.

La autoridad sanitaria informó lo que había contado su madre: el menor fue derivado de manera preventiva al Hospital de Zapala, allí su evolución resultó favorable.

En su declaración institucional, la Región Sanitaria del Pehuén sostuvo que “se han activado los procedimientos correspondientes para la revisión del hecho y la determinación de responsabilidades. Además, se encuentra en curso una intervención judicial”.

El organismo comprometió a su equipo en fortalecer la evaluación de los procesos y el desempeño de los agentes de salud que integra su red asistencial. “La Región Sanitaria del Pehuén ha reafirmado su compromiso con la seguridad y la calidad de la atención”, indicó el comunicado, reproducido por LM Neuquén.