Novak Djokovic volvió a demostrar por qué es uno de los grandes de la historia del tenis: se consagró campeón en el ATP de Atenas al vencer en una final electrizante al italiano Lorenzo Musetti, por 4-6, 6-3 y 7-5.
El serbio sumó el título número 101 a su historial y se acercó al trono en la lista de los máximos ganadores de todos los tiempos, liderada por el estadounidense Jimmy Connors con 109, seguido por el suizo Roger Federer, con 103, según los registros de la ATP.
Nole lo festejó de una manera muy particular: luego de un primer saque que su rival no logró contestar, se dejó caer hacia atrás. Luego, rompió su camiseta y celebró en forma efusiva con el público.
Djokovic llega en un muy buen momento a las ATP Finals, donde buscará su octavo título. El trago amargo para el italiano es que la derrota le frustró la ilusión de participar del torneo que reúne a los ocho mejores jugadores del año. Debía ser campeón en el certamen griego para arrebatarle la última plaza al canadiense Félix Auger-Aliassime. No pudo ser.
El partido fue una verdadera batalla desde el primer punto. Djokovic (5° en el ranking) y Musetti (9°) se repartieron golpes, quiebres y emociones a lo largo de todo el encuentro, que se definió recién en el último set.
El serbio rompió el servicio de su rival en el undécimo juego y luego se mostró implacable con el servicio. Fiel a su estilo, sacó a relucir toda su experiencia y jerarquía en los momentos clave. Así sumó un nuevo trofeo a su vitrina.
Djokovic sigue agrandando su leyenda en el circuito ATP y deja en claro que, a pesar del paso del tiempo, su ambición y su nivel siguen intactos en el nuevo orden mundial del tenis, marcado por el duelo que sostienen los exponentes de la nueva generación, el italiano Jannik Sinner y el español Carlos Alcaraz, número 1 y 2 del ranking, respectivamente.
Musetti dejó una gran imagen y los aplausos que recibió en el final fueron un reconocimiento a su actualidad, que lo tiene en un nivel a la altura de los jugadores top.
Para Djokovic, la conquista tuvo un sabor especial: el Hellenic Championship nació tras el traslado del Belgrade Open, torneo cuya licencia pertenece a la familia del tenista. Su hermano, Djordje, continuó como director del certamen que abandonó Serbia tras un enfrentamiento entre el jugador con más títulos de Grand Slam de la historia y el gobierno de su país, encabezado por el presidente Aleksandar Vucic.
Nole empezó a tomar distancia tras una serie de desencuentros. El punto de inflexión llegó cuando el tenista expresó su apoyo a una protesta estudiantil contra el gobierno.
La mudanza del torneo le permitió a Grecia recuperar un certamen de ese nivel luego de más de tres décadas. El número uno del mundo afianza su vínculo con Atenas, donde se radicó hace unos meses junto a su familia y planea inaugurar una nueva academia de tenis.








