
Javier Milei habló luego de reunirse con 20 gobernadores para discutir -y pedir el apoyo- el Presupuesto 2026 y las próximas reformas del Gobierno. El Presidente dijo que el encuentro fue “extremadamente positivo”, en tanto se alcanzó un acuerdo general, aunque con matices, sobre las necesidades actuales de Argentina. “Hemos logrado estar de acuerdo con matices sobre lo que necesita la argentina en esta etapa”, afirmó y resaltó que el gesto de los gobernadores representa la voluntad de respetar el mandato de cambio expresado por la mayoría de los argentinos.
En diálogo con A24, Milei remarcó que el diálogo es posible siempre que se eviten aquellas recetas que, a su juicio, provocaron el declive del país. “No podemos juntarnos con gente que dos más dos no les da cuatro”, advirtió y excluyó de la convocatoria a quienes, afirmó, sostienen posturas incapaces de facilitar un diálogo razonable.
Uno de los puntos clave de la reunión fue la reforma laboral. Sobre ese tema, el mandatario dijo que “hay consenso absoluto” y explicó: “Argentina tiene un régimen laboral que está absolutamente anacrónico. ¿Sabe cómo se da cuenta? Cuando usted tiene a la mitad de los trabajadores están en el mercado informal. Los propios sindicalistas lo admiten. ¿Cómo funciona? La gente gana derechos porque los que están en el sector informal no tienen ninguno. Usted puede seguir adhiriendo a los contratos que están vigentes hoy. La diferencia es para adelante, para el que tiene que ingresar al mercado laboral o los jóvenes. Cuando usted asegura el empleo de los que están, y eso genera desempleo en los jóvenes y se terminan yendo por Ezeiza porque encuentran laburo».

“Durante el último periodo kirchnerista se fueron 2 millones de chicos. Los que quieren mantenerse en el viejo sistema lo pueden hacer, esto abre la posibilidad de que los que están en el segmento informal puedan ser formalizados. Solamente se ganan derechos de aquellos estaban afuera. Hay un tema que se debatió de manera interesante: el concepto de prelación, el convenio más chico, domina el convenio más grande. Puede tener un convenio por empresa, por municipio, nacional”, completó.
Sobre este punto, agregó que el Presupuesto base cero y el equilibrio fiscal están “consensuados”, y lanzó la propuesta de que quien gaste sea el mismo que recaude, cuestionando la viabilidad de discutir el régimen de coparticipación en este momento.
Consultado sobre la victoria electoral y la incidencia de la dura derrota en los comicios bonaerenses, el Presidente expresó: “La derrota del 7 de septiembre fue una bendición. Eso nos obligó a tener que repensar un montón de cosas y me parece que lo plasmamos en el resultado del 26 de octubre. Le puedo asegurar que el proceso de learing en los últimos dos meses es monstruoso. Aprendí mucho de política y de economía».
En cuanto a sus promesas electorales, Milei se definió como un “bilardista a ultranza” y aseguró que ha cumplido con sus compromisos antes de cumplir dos años de gestión. Atribuyó el avance de las llamadas “reformas de segunda generación” al cumplimiento de las primeras medidas que, bajo la denominada “motosierra”, buscaron equilibrar las cuentas públicas.
Sobre este punto, el jefe de Estado subrayó que “la motosierra significaba lograr el equilibrio fiscal”, explicando que, frente al histórico déficit argentino, su administración consiguió ese objetivo en un mes, cuando según otros referentes políticos el proceso lleva años. Milei reiteró que “cuando decíamos que con eso frenamos la emisión monetaria, terminábamos con la inflación”, y proyectó que para mitad de 2025 el problema inflacionario deberá resolverse.
El mandatario precisó que hoy los ciudadanos pueden elegir la moneda que deseen para realizar transacciones y sostuvo que las variables macroeconómicas acompañan el fortalecimiento del peso, a pesar de las críticas. “Hoy existe una competencia de monedas, si quisieran elegir el dólar los argentinos lo pueden hacer”, aseguró en relación a la política de libre circulación de divisas.
En su balance sobre la evolución de la economía, Milei informó que el PIB experimentó una caída de 1,8%, pero que en diciembre de 2024, en comparación con el año anterior, la economía se ubicó 6,6% por encima. Añadió que la economía mostró signos de recuperación en el primer trimestre, aunque vinculó los retrocesos posteriores a la decisión de la política de introducir “40 leyes contra el plan económico del gobierno”, lo que indujo a un alza del riesgo país y un encarecimiento del costo del dinero.
El mandatario reconoció el esfuerzo de las provincias en la contención del gasto y destacó que “el esfuerzo en la caída del gasto público fue del 31,8%”, al tiempo que las administraciones provinciales hicieron un ajuste superior a los 3 puntos del producto bruto. A su vez, marcó distancia de sectores opositores que, señaló, buscan desestabilizar el rumbo económico. Según sus propias palabras, “el 76% de los argentinos no quiere volver atrás al kirchnerismo”.
La posición comunicada por Milei tras la reunión con gobernadores refuerza los lineamientos centrales que su administración prevé implementar durante el actual ciclo político, en particular el impulso de la reforma laboral, el sostenimiento del déficit cero como política de Estado y la coordinación fiscal entre la Nación y las provincias.
 


