El presidente Javier Milei junto al ministro de Economía, Luis Caputo, en la Sociedad Rural (REUTERS/Matias Baglietto)

“Esta vez se siente diferente”, resumió un funcionario durante la tarde del viernes, por los pasillos de Casa Rosada, en referencia a las elecciones nacionales legislativas. No es el único, varios miembros del Gobierno se muestran esperanzados y aseguran que, a diferencia de los comicios bonaerenses, La Libertad Avanza (LLA) puede hacer una buena performance, aunque persisten los pedidos de cambios.

El lunes 27 de octubre, con los números oficializados, iniciará el primer día de la segunda etapa de gestión, en la que el presidente Javier Milei buscará tender puentes en la construcción de gobernabilidad que necesita para hacer pasar las reformas de segunda generación.

“El mensaje que queremos dar a los mercados es que el lunes, el Gobierno no se cae”, sintetizó un importante ministro a Infobae en las vísperas del domingo.

La distinción con la elección por la composición de la Legislatura bonaerense marcó a dirigentes y autoridades que lo utilizan como parteaguas para diferenciar las expectativas electorales actuales. “Vamos a andar bien a pesar de muchos”, vaticinó una voz de peso en el ecosistema libertario.

El presidente Javier Milei en el bunker de La Libertad Avanza (LLA) tras la derrota bonaerense (Gustavo Gavotti)

El reclamo del Gabinete

Con algo de oxígeno en el tanque, la administración libertaria está segura de una cosa: el lunes, las tensiones al interior del Gobierno deben quedar atrás y para eso el Presidente debe tomar parte. “Las internas se tienen que terminar y los equipos tiene que funcionar como un reloj”, postuló, sin titubeos, un integrante de la mesa chica que rodea al presidente Javier Milei.

Como contó Infobae, el pedido por ordenar los roles atraviesa a todas las tribus en La Libertad Avanza. Para sus funcionarios, Milei debe accionar y designar roles claros. “No se puede tener doble y hasta triple comando. Debe haber una voz designada. Algunos tienen que dejar de hacer en paralelo a lo que hace el otro”, reclamó un alfil del equipo del mandatario.

Hasta entonces, los gobernadores y legisladores aliados debían evaluar qué despacho de Casa Rosada visitar en función de la demanda, lo que generó rispideces internas y mensajes contradictorios que el mandatario sabe que debe corregir. “De ahora en más tienen que terminarse las internas porque hacen daño. Espero que a partir del lunes nos ordenemos todos detrás de Milei”, se mostraba esperanzado un referente territorial.

Con Eduardo “Lule” Menem como articulador del armado electoral; el tándem entre el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y el ministro del Interior, Lisandro Catalán, para cuestiones relativas a la gestión de las provincias, y una tercera vía en el asesor presidencial, Santiago Caputo, la comunicación del Ejecutivo adoptó límites difusos.

El presidente Javier Milei junto a su equipo de colaboradores

Varios miembros del Gabinete lo notaron y le trasladaron su parecer al Presidente que, a principios de julio intentó ordenar la tropa, aunque sin éxito. En esta oportunidad, los funcionarios más experimentados redireccionaron su reclamo a la situación del asesor sin firma. “El Presidente tendrá que analizar y resolver, ver qué rol juega cada uno. Hay actores del equipo de gobierno que no están en el Gabinete que no tienen responsabilidad de gestión y por ahí están tomando decisiones”, supo expresar Francos públicamente.

Lo que el ministro coordinador dijo en Infobae en Vivo, varios funcionarios piensan en privado. Incluso, más de uno se lo hizo saber al jefe de Estado, quien acusó recibo del mensaje y se mostró en coincidencia.

“El Gobierno tiene que tomar una definición que es la de reconstruir el equipo de diciembre de 2024. El interlocutor tiene que hablar, decidir y derivar. Es incluso un mensaje para los gobernadores“, se quejaba un dirigente violeta, que asegura no tomar postura en la interna, sobre la dinámica instrumentada en estos últimos meses de gestión.

Por estas horas, crece la incertidumbre sobre el lugar que ocupará Santiago Caputo en el Gabinete, luego de que el propio Milei dejara abierta la posibilidad de su desembarco en un cargo formal, y algunos se preguntan si habrá más salidas del plantel que las obligadas.

Mientras tanto, el secreto a voces en Balcarce 50 parece ir tomando forma: más allá de la danza de nombres y las acusaciones cruzadas, las diferencias existentes se alojan entre los vértices del Triángulo de Hierro que evitan traslucirlo. “La relación entre Santiago y Karina es como la guerra fría”, ejemplificó un funcionario que detectó además que, cuando la situación parece estar al borde de “estallar”, ambos toman distancia.

El presidente Javier Milei junto a Santiago Caputo y Karina Milei

En búsqueda de los consensos perdidos

Con la modificación en el esquema, el combate de la interna, y los enroques en el Gabinete en los que trabaja Milei, la segunda etapa de la gestión, rumbo 2027, estará marcada por la búsqueda de consensos que le permitan pasar las reformas de segunda generación.

En pleno diseño de la nueva “hoja de ruta”, el mandatario intentará concretar un nuevo acercamiento con los gobernadores aliados, que se distanciaron a raíz de los debates por los cierres de listas. “La idea es acordar con todos los que se pueda acordar”, deslizó un interlocutor a Infobae, con intenciones de calzarse el traje de representante del Ejecutivo.

El presidente Javier Milei junto a gobernadores aliados

Al corriente de la necesidad de acumular “votos” en lugar de “vetos”, el Presidente tiene en mente la idea de dar un mensaje de unidad y convocar al diálogo a los sectores que alguna vez supieron auxiliar al Gobierno. Si los números lo acompañan, podría hacerlo el mismo domingo, durante su discurso en el búnker de La Libertad Avanza (LLA), en Hotel Libertador, ubicado en porteño de Retiro.

Algunos futuristas violetas, aquellos que intentan planificar el devenir, no ven próspero el reencuentro entre el expresidente Mauricio Macri y el libertario, que tuvo a Guillermo Francos de mediador. “Macri todavía no resolvió su bronca. Quedó resentido por los resultados del 2023″, explicó a Infobae un dirigente que descarta la chance del desembarco de referentes del PRO en el equipo libertario.

En su lógica, el ex Boca “no está seguro de querer formar parte del Gobierno”, por lo que los nombres que acerque arrastrarán el mismo problema. “En el hipotético caso, ¿a quiénes van a reportar esos funcionarios? ¿A Macri o a Milei? Eso va a generar más conflicto”, se preguntó. Las tensiones entre las terminales del Ejecutivo parecen ser suficientes para un Gabinete que pide a gritos orden.