Con la campaña electoral ya en marcha, candidatas y candidatos salteños mantienen su agenda colmada de actividades. En ese escenario, Flavia Royón, candidata a senadora nacional en primer término por el Frente Primero los Salteños, mantiene firme la postura de instalar un mensaje: “Somos el único frente que no tiene un jefe en Buenos Aires”.
En diálogo con Salta/12, la exsecretaria de Minería y Energía de la Nación, diputada provincial electa y referente del espacio que lidera el gobernador Gustavo Sáenz, subrayó que su candidatura expresa la necesidad de recuperar un Senado que actúe como contrapeso real frente al poder central. Afirmó que la Cámara Alta nacional es la representación de las provincias por lo que “los que están sentados ahí, están para defender a sus provincias, no a una persona en particular ni a un Gobierno nacional”.
En medio de las continuas acciones de ajuste de la administración nacional, que incluye permanentes vetos presidenciales a leyes que se aprueban en el Congreso, Royón subrayó que el Senado corre el riesgo de vaciarse de sentido si se convierte en “una escribanía del Ejecutivo”. “No podemos permitir que el Congreso sea una escribanía del Gobierno nacional”, sostuvo.
En caso de ganar La Libertad Avanza, “¿con qué Congreso vamos a discutir vetos o reformas estructurales? ¿Con influencers que van a levantar la mano según les indiquen?”, ironizó. Señaló que por eso se necesitan legisladores que tengan formación, experiencia y autonomía.
Mientras el gobernador dijo que si la Nación no continúa la obra de la ruta 9/34 instalará una carpa en la Casa Rosada, la candidata planteó un diagnóstico duro sobre la relación Nación–provincias. Aseguró que actualmente se toman decisiones en Buenos Aires sin dimensionar el impacto en el interior productivo. “Desde allá se ve todo desde la General Paz, y no desde la Salta profunda, la que necesita rutas, inversión y empleo genuino”, refirió, en sintonía con lo que viene planteando Sáenz.
Orden macroeconómico, pero con gestión
Si bien Royón reconoció que el equilibrio fiscal es necesario, principal argumento de los libertarios, criticó la forma en que el Gobierno nacional lo implementa. Dijo que lo primero es ordenar la macroeconomía, puesto que “el déficit cero es una condición necesaria, pero no puede ser a costa de cualquier cosa”.
Expresó que si hubo abuso en distintas áreas gubernamentales, la solución no es cortar todo a todo el mundo, sino “gestionar bien, separar lo que está mal de lo que está bien”. Para la candidata, hoy se ve una simplificación al “cerrar” y “cortar” todo, ya sean organismos públicos como Vialidad Nacional o el INTA, o como las pensiones por discapacidad.
Dijo que el verdadero desafío es construir un Estado eficiente e inteligente, capaz de acompañar el desarrollo y no de retirarse de los territorios. “El camino no es desarmar todo. El camino es gestionar con transparencia y eficiencia”, sostuvo.
Contra la polarización
Asimismo, Flavia Royón cuestionó el clima político actual, marcado por la confrontación y los extremos. Dijo que hoy pareciera que se tiene que elegir “entre un circo de insultos y chicanas” (libertarios) y “un pasado que ya estuvo gobernando tantos años” (peronismo).
El armado del frente Primero los Salteños se gestó porque “ninguno de los dos caminos representa lo que necesitamos”, según la candidata. Dijo que por esto es preciso contar con “representantes de otra calidad, que hablen de desarrollo, educación, salud, cuidado del ambiente. Eso es lo que le importa a la gente común”.
Subrayó además que su espacio se diferencia de las estructuras nacionales, siendo el “único frente que no tiene un jefe en Buenos Aires”. Aseguró que no tienen referencia nacional que les digan qué se tiene que votar ni cómo se tiene que actuar. “Nuestra lealtad es con Salta y con su gente. No vamos a levantar la mano porque lo ordene Cristina, Milei o Macri. Vamos a defender a la provincia”, manifestó.
En ese sentido, afirmó que “el Senado debe ser la casa de las provincias, no una escribanía del Ejecutivo”. Ante ello, ratificó que planea llegar al Congreso para que “Salta tenga voz propia, para que discutamos desarrollo y no nos condenen a ser solo proveedores de recursos baratos”.
Royón también se refirió a las denuncias por supuestas coimas que involucran a funcionarios nacionales de primera línea, como la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei. Dijo que espera que la justicia intervenga, aunque “hasta ahora lo que hubo es un bozal para que no se hable más del tema”. Afirmó que en un Estado democrático debe regir la libertad de expresión. “Si hay audios que comprometen a funcionarios, deben investigarse hasta el final”, insistió.
La dirigente advirtió que la transparencia debe ser una regla de juego, sin importar quién gobierne. En ese sentido, dijo que el peronismo tuvo sus causas, el macrismo las suyas. Y actualmente, el oficialismo nacional tiene denuncias que también deben investigarse. “No puede haber doble vara”, reiteró.
Agua, energía y biocombustibles
En cuanto a sus propuestas, Flavia Royón dijo que algunas giran en torno a los biocombustibles, la energía y la minería. Lamentó que en materia de biocombustibles, Salta perdió la oportunidad de producir biodiésel y bioetanol a partir de maíz. “Podríamos haber generado cientos de empleos, pero el esquema nacional nos dejó afuera”, cuestionó.
En cuanto a energía y tarifas, sostuvo que la ley de zona fría debe rediscutirse, porque las tarifas energéticas no pueden ser un obstáculo para el desarrollo del norte argentino. Mientras que, en lo referente a minería, dijo que “hay que actualizar el Código Minero, evitar la especulación inmobiliaria y garantizar que las inversiones en litio se traduzcan en empleo local y desarrollo regional”.
En ese marco, destacó que Salta tiene oportunidades concretas en el campo energético y productivo. Para ella, la transición energética no puede ser solo para las provincias centrales. “Salta tiene litio, gas, energías renovables, biocombustibles. Pero si no tenemos voz en el Congreso, esas oportunidades se definen en Buenos Aires”, insistió.
Asimismo, dijo que actualmente el país se encuentra en un punto de inflexión. Afirmó que “Argentina tiene que discutir en serio una reforma impositiva que no asfixie a las pymes, una reforma laboral que incentive el empleo y una reforma previsional que sea sostenible”. Pero señaló que ello no puede hacerse desde la imposición de un gobierno que no escucha, sino con acuerdos federales.
La candidata también analizó la Ley Bases, dado que los diputados locales afines a Sáenz dieron luz verde a la ley de reforma estructural del Estado argentino. En su opinión, esta ley se tenía que analizar en profundidad. Dijo que si bien coincidía en la necesidad de ordenar emergencias, no coincidía en otras cuestiones. A modo de ejemplo, dijo que el capítulo energético tiene puntos que había que acompañar, como la reforma de hidrocarburos o la unificación de entes reguladores, “pero no podía votarse un listado de más de 40 privatizaciones sin discusión”, señaló.