Un incendio registrado este viernes en el Instituto Espíritu Santo, ubicado en el barrio porteño de Vélez Sarsfield, obligó a evacuar a los alumnos y a trasladar a dos adultos por inhalación de humo.

El episodio ocurrió pasado el mediodía en el establecimiento educativo situado en Avellaneda al 4400. La noticia fue comunicada inicialmente por Néstor Nicolás, subsecretario de Emergencias de la Ciudad.

De acuerdo a lo informado por el funcionario porteño, el fuego fue rápidamente combatido por Bomberos de la Ciudad, quienes evacuaron a los menores y resguardaron a toda la comunidad educativa.

Las dos personas adultas recibieron atención médica por inhalar humo y personal del Sistema de Atención Médica de Emergencia (SAME) ordenó su traslado preventivo para controles. No se informaron víctimas graves ni daños mayores, solo el susto por la situación.

El Instituto Espíritu Santo funciona en Avellaneda 4455 y pertenece a la Congregación Misionera de las Siervas del Espíritu Santo. Fundado en 1924, el colegio reúne cien años de historia dedicados a la educación y es uno de los establecimientos religiosos con mayor trayectoria de la Ciudad.

El Instituto Espíritu Santo fue evacuado

Durante el último mes, es la Ciudad se produjeron otros incendios en distintos barrios. El 28 de julio, un departamento de San Nicolás, en Bartolomé Mitre al 1400, tomó fuego en el sexto piso y obligó a evacuar a 25 vecinos. En ese caso, un policía recibió oxígeno después de inhalar humo, pero no fue necesaria su internación.

Al día siguiente, los bomberos también actuaron en la terraza de un edificio de dos plantas en Palermo, sobre José Antonio Cabrera al 4300. En el operativo se evacuó a una decena de familias y mascotas, sin heridos.

En Almagro, el 2 de agosto, ocurrió una tragedia: una mujer de 91 años murió durante un incendio en un departamento de Yatay y Rivadavia. Además, 32 recibieron asistencia médica, ocho de los cuales fueron derivados a hospitales porteños. El despliegue de emergencia fue fuerte: el SAME trabajó con 17 móviles para asistir a todos los afectados.

Unos días después, una casa de Belgrano, en Sucre al 1200, se prendió fuego desde el patio hasta el techo. Aquella vez, dos personas recibieron oxígeno y un hombre fue trasladado al hospital, mientras que un bombero fue atendido por exposición al humo y un perro doméstico falleció durante el hecho.

En Parque Patricios, el 7 de agosto, la familia de un edificio en General Urquiza y Garro apagó un foco ígneo en el living con baldes de agua antes de que llegaran los bomberos. El fuego tomó un sillón, pero solo se vio afectada una pequeña superficie del ambiente.

Otro incidente sucedió el viernes pasado en un galpón ferroviario de Caballito, localizado en avenida Avellaneda al 1300. Allí, las llamas alcanzaron cuatro metros de altura y una columna de humo negro fue visible desde otros barrios. El trabajo evitó que el fuego siguiera avanzando hacia construcciones linderas.

En todos los operativos, participaron dotaciones de y personal SAME, quienes auxiliaron a los vecinos afectados y controlaron los riesgos para evitar que las llamas se extiendan.