Hyam Tannous, Angela Scharf y Reem Al-Hajajreh (Jaime Olivos)

A simple vista hay diferencias entre las dos mujeres israelíes y la palestina que recibieron a Infobae en el lobby de un hotel boutique de Palermo. Hyam Tannous y Angela Scharf son de aspecto occidental. Y Reem Al-Hajajreh, musulmana que lleva un pañuelo que tapa su cabello. Desde hace 4 años, trabajan juntas por la paz en la región. “La paz es la única forma de obtener seguridad para todos los pueblos de la región”, dicen a coro como si recitaran un mantra para enfrentar la muerte y el odio entre judíos y árabes de Medio Oriente.

Así, en 2022, Mujeres activan por la Paz de Israel y las palestinas de Mujeres del Sol firmaron un acuerdo para trabajar en conjunto. “Nosotras, mujeres palestinas e israelíes de todos los ámbitos de la vida, estamos unidas en el deseo humano de un futuro de paz, libertad, igualdad, derechos y seguridad para nuestros hijos y las próximas generaciones”. Así comienza el texto fundacional “Llamado de las madres”.

Las dos israelíes forman parte de Mujeres activan por la paz (Jaime Olivos)

Símbolos de paz

Scharf nació en Viena y llegó a Israel a los 18 años para estudiar Ciencias Políticas en la Universidad de Jerusalén. Primero se sumó a las protestas que hacían en Mujeres activan por la paz en las calles de Tel Aviv. “Con pancartas nos parábamos frente al tránsito cuando cortaba el semáforo -recuerda la mujer-. Luego me involucré mucho más”.

Scharf es especialista en diplomacia y en 2024, representó a Mujeres activan por la paz en Viena, donde habló ante 500 personas y se reunió con el presidente de Austria.

Tannous es árabe israelí católica. Tiene su corazón dividido entre las dos tierras. Fue inspectora de docentes de colegios hasta que se jubiló en 2016. Allí se sumó a las Mujeres que activan por la paz. “Desde que nací mi país Israel está en guerra con mi pueblo, Palestina. Eso es una situación muy difícil”, explica.

Reem Al-Hajajreh vive en un campo de refugiados en Cisjordania (Jaime Olivos)

Tannous estudió psicología y eso la ayudó a sanar. “Puedo entender que todos sufrimos dolor y comprendo el de otras personas. Como espero que comprendan el mío. Mis tíos fueron expulsados en 1948 por la nakba antes de la creación del estado israelí”, cuenta.

Al-Hajajreh nació en Cisjordania y vive en un campo de refugiados de Belén, muy cerca de la frontera con Israel y de campamentos de colonos judíos en territorio palestino. Su militancia por la paz la hizo separarse de su marido. “Muchos allá me ven como una traidora por mis ideas a favor de la paz – explica en diálogo con Infobae-. Mi relato incluye la existencia de un estado israelí en Medio Oriente en convivencia con uno palestino. Eso no es bien visto por muchos de mis compatriotas”.

Reem empezó un trabajo social primero en el campo de refugiados y de allí extendió sus redes al resto del país tanto en Cisjordania como en Gaza. Su militancia es compleja porque es vista como una traición por otros palestinos. “En muchas marchas me han disparado y siempre que vuelvo de un viaje me miran con recelo”, pero ella sigue adelante.

Las tres mujeres viajarán a Santiago del Estero y luego a Uruguay para reunirse con el presidente de ese país, Yatmandú Orsi (Jaime Olivos)

En ese sentido, la mujer musulmana explica que su trabajo es social y que no tiene participación política.“¿Hamas alguna vez las amenazó?“, preguntó Infobae. Al-Hajajreh se sonríe, hace un silencio de unos segundos y niega con la cabeza.

La relación con los israelíes no fue fácil para Al-Hajajreh. Primero tuvo un contacto con grupos que pedían la paz pero no llegó a acuerdos. “Cada uno mantenía su relato y era difícil el diálogo”, sostiene.

Tras ese encuentro fallido, Reem se contactó con las Mujeres que activan por la paz y así nació esta unión. “Les dije que no miremos el pasado, que miremos hacia adelante para lograr lo mejor para los pueblos”, cuenta.

La mujer palestina fue atacada en alguna de las manifestaciones por la paz que realizó

Las mujeres como vanguardia de paz

En ese mismo sentido, Scharf valora que sean las mujeres quienes tengan este tipo de iniciativas en la región. “Son problemas que los hombres no pudieron resolver durante 100 años”, advierte. Y Tannous agrega: “Lo hacemos porque tenemos una buena conjunción de mente, corazón y útero. Lo hacemos las que somos madres y también las que eligen o no pueden tener hijos”.

Las tres mujeres estuvieron el miércoles en un acto en la Legislatura porteña. Allí, en el salón estaban las banderas argentinas, israelí y también la de Palestina. Las tres se sorprendieron al ver los dos emblemas juntos. Tannous sostiene que simboliza sus dos pueblos. En cambio, Scharf se mostró a favor pero también estaba preocupada por cuál sería la reacción en Israel.

A Reem también la impactó ver las dos banderas juntas. “Algo que no sucede nunca en ninguna parte del mundo”, admite.

Tras el ataque del 7 de octubre del 2023, el movimiento decidió seguir militando a favor de la paz

7 de octubre de 2023: cómo seguir

El ataque de Hamas del 7 de octubre de 2023 generó un parteaguas en todas las sociedades de Medio Oriente. Las palabras que usan las tres mujeres para describir ese momento es “shock”. Mujeres que activan por la paz perdió a una de sus referentes que fue asesinada en la casa de su kibutz. Vivian Silver tenía 74 años y era una canadiense israelí que fue asesinada ese día.

El ataque causó la muerte de 1.219 personas del lado israelí, en su mayoría civiles, según datos oficiales. De las 251 personas secuestradas ese día, 49 siguen cautivas en Gaza, de las cuales 27 se cree que estarían muertas.

Tres días antes de ese 7 de octubre, hubo una marcha de mujeres israelíes y palestinas para pedir por la paz en la región. Tres días después la región cambiaría para siempre. “Estuvimos dos semanas en silencio por todo el horror y también porque sufrimos la pérdida de Vivian – cuenta Scharf-. Después de ese lapso recibimos el llamado de Reem para seguir trabajando por la paz y nos pusimos de a poco en marcha de nuevo”.

Tres días antes de ese 7 de octubre del 2023, hubo una marcha de mujeres israelíes y palestinas para pedir por la paz en la región (Jaime Olivos)

Al-Hajajreh cuenta que en la guerra de Gaza murió una de las referentes del grupo y otras 43 mujeres junto a toda su familia. Reem tiene tres hijos a los que educa con amor y en su militancia de paz. “Es difícil porque la situación en las que nos ponen desde Israel hace que el odio surja en los jóvenes que intentan buscar una salida a esta situación”.

Desde Mujeres que activan por la paz condenan la hambruna que sufren los habitantes de Gaza. “Es inadmisible y debe terminar de inmediato”, sostiene Scharf.

Las tres mujeres llegaron a la Argentina invitadas por el Centro Ana Frank Argentina para América Latina (CAFA) y Mujeres Activan por la Paz – Red Iberoamericana. En estos días, la delegación hará una visita a Santiago del Estero y luego viajarán a Uruguay para reunirse con Yamandú Orsi, el presidente de ese país.

El viernes 8 de agosto, en el auditorio Soka Gakkai, se organiza un Encuentro por la paz que reunirá a 1.000 estudiantes de nivel secundario. Luego, a las 13, las activistas presentarán su testimonio ante la Honorable Cámara de Diputados de la Nación. La agenda en Buenos Aires se completa el domingo 10 con una actividad de diálogo en Hit Café

Para la foto, Angela y Hyam llaman a Reem y la ubican en el medio. Las tres se abrazan, sonríen y hacen chistes en hebreo y árabe. Como si la paz que tanto buscan y añoran estuviera a la vuelta de la esquina.