Todo comenzó con intento de robo en un estudio jurídico del barrio porteño de Retiro. Luego de que detuvieran a un ciudadano de nacionalidad colombiana, la Policía de la Ciudad descubrió que se trataba de una inmigrante que, supuestamente, había salido del país en 2013. Además, fue identificado como el autor de un robo de joyas cometido durante el Mundial de Rusia 2018.
Se trataba de Edgar Alejandro Valero, un hombre de 40 años, que contaba con antecedentes penales a nivel internacional. Pues había sido condenado en 2021 a cinco años de prisión por la Justicia de Rusia, después de que fuera encontrado responsable de un asalto millonario. El valor del botín alcanzaba la friolera cifra de dos millones de dólares.
De acuerdo con las autoridades rusas, el acusado se había llevado un maletín lleno de diamantes de una exposición de joyas realizada en Kazán, una de las ciudades que fue sede durante el mundial de fútbol. Incluso, había aprovechado que el foco de la atención estaba en la final del torneo, para abordar un avión y concretar el escape.
Luego de que se abriera una investigación para dar con el sospechoso, Valero fue detenido en septiembre de 2019 en Argentina. Tras un trabajo conjunto con la Fiscalía General de Rusia, el detenido fue extraditado en marzo de 2021. “Autorízase la entrega inmediata del ciudadano colombiano a las autoridades de la Federación de Rusia”, comunicaron en el decreto 713/2020.
La sentencia emitida por el juzgado del distrito Provolzhski, de Kazán, condenó a Valero a cinco años de prisión en el centro penitenciario de la región. Por ende, se suponía que el colombiano debería continuar con la purga de su condena. No obstante, habría un espacio en blanco entre el día del veredicto y su detención en la Ciudad de Buenos Aires.
Para las autoridades nacionales sería un completo misterio cuándo y cómo el acusado regresó a la Argentina. Sobre todo, porque los últimos registros suyos obtenidos por Migraciones informaban que había salido el 2 de enero de 2013 desde el Aeropuerto de Ezeiza con destino a Colombia.
Desde ese entonces, el rastro de Valero se perdió por completo. Sin embargo, la cronología del caso indicaría que el colombiano podría haber ingresado y salido del territorio argentino en más de una oportunidad, ya que su arresto y extradición se completó varios años más tarde de su supuesto egreso.
Fuentes oficiales confirmaron a Infobae que el hombre contaba con residencia permanente desde el 16 de diciembre de 2008. Aunque no se tienen registros de los domicilios que habría tenido en el país, se constató que en la actualidad vivía en una pensión ubicada en el barrio de Constitución.
No obstante, su captura se dio el pasado 30 de julio, cerca de las 19 horas, en un edificio de la calle Cerrito al 1200, en Retiro, después de que intentara robar en un estudio jurídico que funcionaba en las oficinas del piso 7 y 10. Al momento del ataque, solo se encontraba uno de los abogados, quien relató haber sido sorprendido y reducido por Valero.
Según la denuncia, la víctima se encontraba solo en la oficina cuando escuchó ruidos en la puerta. Luego de que fuera a revisar qué sucedía, el acusado logró entrar, lo amenazó con un destornillador y lo obligó a recorrer el resto de los sectores.
Además de utilizar la herramienta como arma de intimidación, Valero habría intentado forzar las cerraduras de otros despachos. Al no tener éxito en la maniobra, bajó hasta la planta baja con la intención de escapar, pero fue detenido por el encargado del edificio.
Después de que arribara el personal policial de la Comisaría Vecinal 1A, el empleado aseguró que se trataba de un sujeto desconocido para el lugar y denunció que este había irrumpido en el estudio jurídico con el objetivo de concretar un robo. Sumada a la declaración del abogado, las autoridades ordenaron detenerlo y ponerlo a disposición de la Justicia.
La causa quedó en manos del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 38, que avaló la actuación policial y dispuso las medidas de rigor, entre ellas pericias en el lugar. Tras secuestrarse un destornillador tipo plano, un teléfono celular marca Samsung, una boina color gris y una tarjeta magnética de ingreso; se confirmó que Valero sería imputado por el delito de tentativa de robo.