La mujer de 40 años acusada de apuñalar y matar a su expareja con un cuchillo tipo tramontina en el barrio de Belgrano seguirá detenida tras ser procesada con prisión preventiva. La decisión fue tomada por el juez Edmundo Rabbione luego de un análisis de las pruebas recabadas en la causa. Entre ellas, los registros de cámaras de seguridad que documentaron el momento en el que se la ve atacar al hombre en plena avenida Cabildo.
El hecho ocurrió en la madrugada del pasado 4 de julio y fue descubierto horas después, cuando la Policía de la Ciudad de Buenos Aires recibió la advertencia sobre un cuerpo tendido en plena vía pública con heridas de arma blanca. Se trataba de Miguel Ángel Leguizamón, de 33 años.
Por el hecho, su exnovia quedó imputada por “homicidio agravado por haber sido cometido contra la persona con la que ha mantenido una relación de pareja”, delito que contempla una pena de prisión perpetua. Además, la justicia le imputó el delito de “falsificación de documento público” por presentar, al ser detenida, un certificado de discapacidad apócrifo.
El caso recayó en la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional Nº44, a cargo de Pablo Recchini. De acuerdo con el expediente, las horas previas al crimen la mujer y Leguizamón permanecieron varias horas juntos en el departamento, y habrían consumido estupefacientes, según declaró una vecina testigo del caso.
Esa noche, los vecinos del edificio donde ella vivía enviaron a un grupo de WhatsApp algunas fotos de manchas de sangre que encontraron en la entrada y el ascensor. Aproximadamente a las 2:15 del 4 de julio, varios testigos dijeron haber escuchado una fuerte discusión y hasta uno de ellos presenció parte de la pelea. En este contexto, indicaron que la acusada golpeó a Leguizamón en el palier antes de que ambos abandonaran el domicilio.
Las cámaras de seguridad registraron la salida de los dos y la continuación del altercado hasta la esquina de las calles Rivera y Cabildo, donde la imputada se acercó y lo apuñaló en la zona del corazón con un arma blanca. En las imágenes se vio cómo la víctima intentó defenderse y huyó en dirección a una pizzería, seguido de cerca por la mujer.
Todo este detalle es mencionado en el fallo judicial como parte de los fundamentos para ordenar que la sospechosa continúe en prisión.
El video que encabeza esta nota es otra de las grabaciones clave de la causa. Allí se ve que los dos cruzaron juntos hasta la intersección con la calle Roosevelt y la agresión se repitió: la acusada volvió a atacarlo en el pecho con un objeto punzante.
Tras esta última embestida, Leguizamón cayó al suelo sin fuerzas mientras la imputada pedía ayuda a los gritos, según se reconstruyó en la causa. Al llegar la policía y realizar los primeros trabajos en la escena del crimen, los agentes procedieron a la detención de la mujer y secuestraron un cuchillo de 12 centímetros, además de un objeto punzante de 5 centímetros de largo.
El cuchillo tipo tramontina hallado en el lugar del hecho fue identificado como el arma mortal, según se especificó en la resolución judicial dictada en las últimas noticias.
En el procesamiento a prisión preventiva, el juez citó el informe de autopsia, que determinó que la lesión “en la región pectoral izquierda había comprometido la pleura, el pericardio y ambos ventrículos del corazón”, lo que ocasionó hemorragia interna y externa.
En este sentido, el juez Rabbione sostuvo que las “lesiones punzo cortantes y mortales” fueron infligidas por la imputada y afirmó: “La nombrada ha utilizado un cuchillo de cocina tipo ‘tramontina’, con el que acometió en al menos tres oportunidades y en la vía pública contra el cuerpo de Leguizamón, hasta que finalmente este cayó desvanecido”.
La prisión preventiva se fundamentó en la gravedad del hecho, los antecedentes de la acusada —incluida una suspensión de juicio a prueba por robo y hurto— y el riesgo de entorpecimiento del proceso judicial. La mujer permanecerá detenida hasta la resolución definitiva de la causa, con la posibilidad de enfrentar una condena a prisión perpetua.