Juan Pablo Geretto se abrió camino por su enorme talento, pero para llegar donde está tuvo que sortear diverso obstáculos. Sin embargo, triunfó y nos regaló un personaje icónico, como es la «maestra normal», personaje con el que compuso shows cargados de humor, amor y emoción, que permiten a los espectadores transportarse a los tiempos escolares.
Este viernes, para deleite de los rosarinos, Geretto vuelve a la ciudad y, en entrevista exclusiva con Conclusión, contó todos los secretos para que la «maestra normal» perdure en el tiempo y en el corazón de los espectadores.
-Volvés a Rosario con este show aclamado por el público, ¿qué es lo que te motiva presentarlo nuevamente?
– No me canso de hacerlo. El espectáculo tiene una virtud en mí que es esa, siempre me sorprende algo. Es muy difícil de explicar para la gente que no hace teatro, que no es siempre lo mismo; que, aunque el texto parezca el mismo, que de hecho no lo es, es el hecho teatral, que es la energía de la gente y la mía, que es la sensación de novedad que me da. El espectáculo se sostiene joven.
– Tu señorita Marta fue la inspiración para el personaje, ¿qué cosas le agregas de los tiempos que corren?
– Yo creo que, a través de los años de primaria, uno va recogiendo de aquí y de allá, y después cuando vos encontrás las mismas voces en un montón de gente, quiere decir que son voces como aceptadas del sistema educativo. Todos esos lugares comunes en donde caemos, son sitios donde resultó o se llegó del punto A al punto B más rápido, fueron adoptando el resto de los docentes. Con respecto a si le agrego cosas, el espectáculo cambia menos de lo que uno cree, porque tienen bastante rigurosidad algunas estructuras que no puedo cambiar. Pero sí voy cambiando lentamente algunas cositas, porque no quiero que me distraiga hasta que la incorpore del todo. Hay cosas que parecen improvisadas pero que no se pueden hacer así, excepto a que te permitas dejar un espacio para hacerlo.
-No solo la maestra te dio satisfacciones laborales. Has explorado más personajes en “Solo como una perra” y en “Como quien oye llover”. En esos espectáculos ¿incluiste interpretaciones que hacías en tus comienzos?
– Básicamente todos mis personajes nacieron cuando empecé en Rosario. Los espectáculos han durado mucho; la maestra era parte de “Solo como una perra”, y luego tuvo un show propio. “Como quien oye llover” nació en Rosario, “Estrella” no, pero está dentro del universo santafesino (risas). Cada vez que me pongo a pensar un personaje o un espectáculo, es imposible abstraerme de ese paisaje inicial.
– ¿Qué te pasa cuando conectas con la gente y ves como ríen y emocionan?
– Es un espectáculo sin cuarta pared y mirando al frente, entonces los veo todo el tiempo. Tengo mucho ejercicio en eso y es muy emocionante y se lo deseo a todo el mundo que lo haga. Ojalá lo pudiesen vivir los momentos que uno se lleva y atesora, o que se rían y emocionen como lo hago arriba del escenario. El espectáculo tiene muchas cosas, pero hay algunas que son las que más disfrutamos hacer los actores. Cuando transitas algo durante muchos años, empezás a ver las sutilezas y eso es lo que busco, como encontrar la emoción más chiquita, más conectada con lo personal, más que con el espectáculo en general.
– Contame cómo te convocaron para hacer “Las cosas maravillosas”.
– Voy a hacer esta obra a partir de octubre en el Multiteatro de Buenos Aires y creo que lo vamos a hacer también en Rosario. Es una obra inglesa escrita por Duncan Macmillian, un unipersonal que explora todos los recursos de una persona; desde su infancia hasta su adultez. El va creando una lista de cosas maravillosas para ayudar a su madre depresiva, y va transcurriendo entre la comedia y el drama. Está tan bien escrita que ha funcionado en todos los lugares que se presentó; y la particularidad es que, en Argentina, ya lleva tres años en cartel y el narrador va cambiando cada tres meses. Puede ser un hombre o una mujer, y es un ejercicio que cada actor le pone su mirada, pero algunas quedan.
– ¿Crees que es una obra escrita para vos?
– Parece que sí (risas), cuando la leí entendí que era algo que podía ser; que iba conmigo.
-Por último, ¿cuál es el secreto de que la maestra perdure en el tiempo?
– Las cosas no cambiaron mucho, sí, la fachada y el maquillaje, ya que el sistema educativo sigue siendo el mismo. También hay algo que da un poco la vuelta con las generaciones que ya lo vieron y ya pasaron más de diez años, y pasan de ser parte de la nostalgia de esas personas. Yo no me canso de hacerlo porque está vivo en mí.
Juan Pablo Geretto se presenta este viernes, a las 21, en el Teatro Broadway, San Lorenzo 1223.