Después de agonizar durante casi 48 horas, Thiago Correa, el nene de 7 años que fue baleado en la cabeza por un policía de la Federal que se resistió a un robo en La Matanza, murió este viernes. Fue Fabián, su papá, quien lo confirmó desde la puerta del Hospital de Niños de San Justo.
Invadido por el dolor, el hombre apenas atinó a comunicar la peor noticia y -como suele ocurrir en este tipo de casos- pedir justicia por la muerte de su hijo. “Es muy doloroso para todos. (…) Pido disculpas, muchas gracias por estar. Necesito justicia por Thiago, por favor. Esto se tiene que pagar como tiene que ser”, dijo el papá de la víctima.
No era la primera vez que Fabián hablaba ante los medios. Durante los días que el niño estuvo internado, el hombre contó algunos detalles de la vida de su hijo.
Dijo, por ejemplo, que Thiago era un chico “amoroso, muy amiguero y una persona querida” por toda la gente que lo rodea. Indicó que asiste al Colegio Parroquial Santa Rosa y que también va a un club de fútbol de la zona: Defensores Unidos de La Tablada.
El día del episodio, Thiago vivió una jornada como tantas otras. Asistió al colegio, después fue a entrenar y, al finalizar, fue hasta la casa de su papá. Más tarde, cuando ambos esperaban el colectivo para ir juntos a la casa de la mamá, el balazo policial alcanzó al chico.
Fue el miércoles por la noche, alrededor de las 22.30, en la intersección de avenida Crovara y Madrid. Allí, Fabián y su hijo estaban en la parada cuando, según la reconstrucción de los investigadores, un agente de la Policía Federal Argentina fue abordado por cuatro delincuentes armados.
El efectivo estaba vestido de civil y fuera de servicio. Se identificó como personal policial, sacó su pistola reglamentaria y comenzó a disparar.
En ese tiroteo, una bala impactó en la cabeza de Thiago, a quien su papá había alzado sobre sus hombros mientras aguardaban la llegada del colectivo.
“Cuando estábamos esperando el colectivo, escuché una explosión y pensé que era una moto, pero de repente empezaron a escucharse más detonaciones. Cuando me di cuenta de que se estaban agarrando a tiros, quise tirar al piso a Thiago, pero ya le había impactado una bala”, relató este jueves Fabián a TN.
Y recordó con angustia: “Cuando le da el impacto y lo tengo en mis brazos, me dice ‘pá’ y ya no dijo más nada. Empecé a gritar ‘ayuda’ y apareció un auto con un hombre que no conozco y me llevó al hospital”.
“La bala le pegó en la parte de atrás de la cabeza. Siete años tiene Thiago, toda una vida por delante. No puedo creer lo que me está pasando, es una pesadilla”, había dicho el papá cuando todavía tenía la esperanza de que el menor se recuperara.
El agente que disparó la bala mortal fue identificado como Facundo Daniel Aguilar Fajardo, de 21 años, oficial ayudante de la Dirección Montada de la PFA, quien quedó detenido por orden del fiscal Diego Rulli, acusado de homicidio en exceso en la legítima defensa.
Durante el enfrentamiento, uno de los ladrones, Brandon Corpus Antelo, de 18 años, murió tras recibir un disparo en el cuello. Otros dos, identificados como Uriel Alexis Montenovo y Uriel Emanuel Leiva, ambos de 21 años, terminaron heridos: uno con un impacto en la pierna derecha y el otro en el abdomen, en estado grave. El cuarto asaltante se dio a la fuga.
En la escena del tiroteo, personal de la policía científica encontró un revólver calibre .38 sin numeración ni municiones, una vaina servida, un proyectil deformado y rastros de sangre de Thiago a casi 200 metros del lugar donde cayó herido. También fue secuestrada el arma reglamentaria del agente de la PFA.
El comunicado del club donde jugaba Thiago Correa
Tras la confirmación de su fallecimiento, el Club Defensores Unidos de Tablada emitió un comunicado para despedir al niño de 7 años.
“Con profunda tristeza, el Club Defensores Unidos de Tablada despedirá este viernes a Thiago Correa, un pequeño guerrero de tan solo 7 años, que formaba parte de nuestra familia deportiva”, inicia el mensaje.
“Thiago luchó con valentía hasta el final, pero una tragedia injusta nos lo arrebató demasiado pronto. Su sonrisa, su energía y su amor por el deporte quedarán por siempre en nuestra memoria”, continuó el escrito.
“Acompañamos en este inmenso dolor a su familia, seres queridos y compañero de equipo. Descansá en paz, Thiago. Siempre estará en el corazón de Defensores”, concluyó la institución.
Desde el club informaron la suspensión de todas las actividades programadas en la Sede Crovara durante el viernes y el sábado.