El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, aseguró este jueves que trabaja junto a la Justicia bonaernese y el Gobierno Nacional para que reabra La Salada, la feria más importante en el Conurbano.

El mandatario bonaerense aseguró que se destinarán todos los recursos necesarios para reabrir la popular feria que ha estado en el centro de un intenso conflicto laboral y legal.

En ese sentido, cabe recordar que la controversia comenzó cuando las autoridades clausuraron el lugar hace dos semanas debido a irregularidades legales y fiscales relacionadas con la detención de Jorge Omar Castillo, conocido como el “Rey de La Salada”.

Luego de esta decisión, se desencadenaron una serie de protestas masivas por parte de los feriantes, quienes dependen de esta fuente de trabajo para sostener a sus familias.

Durante una reunión celebrada en la municipalidad de Lomas de Zamora en la tarde de este jueves, a la cual asistieron funcionarios de distintos niveles de gobierno, Kicillof manifestó el compromiso del ejecutivo provincial por regularizar la situación de las ferias y preservar los empleos de los trabajadores.

El tweet del gobernador bonaerense

Desde la provincia de Buenos Aires estamos trabajando junto al Gobierno nacional, el municipio de Lomas de Zamora y la fiscal Cecilia Incardona para que los trabajadores puedan mantener sus fuentes laborales”, anunció. Según informó, en la reunión también participaron el ministro de Seguridad, Javier Alonso, el subsecretario de Comercio de la Provincia, Ariel Aguilar, y otros funcionarios clave.

En las inmediaciones de la municipalidad, una congregación de feriantes se presentó en protesta, exigiendo una solución rápida para la reapertura del predio. “La Salada no se cierra”, proclamaron sus representantes tras la reunión que derivó en la reapertura del lugar para la próxima semana.

En la cumbre estuvieron presentes autoridades del ámbito nacional, provincial y municipal, junto con representantes de la Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (ARBA), entre otros organismos.

Las conversaciones culminaron con un acuerdo preliminar sobre las condiciones para la reapertura de la feria. Se estableció que los feriantes deberán cumplir con ciertos requerimientos judiciales y fiscales antes de poder operar nuevamente. “Se armará un plan de trabajo y se determinarán las formas en que se regularizará a los puestos”, mencionaron los representantes de los trabajadores.

La incertidumbre recae sobre los tiempos en que se producirá la efectiva reapertura de La Salada. Aunque no hay una fecha exacta, los feriantes han obtenido el compromiso de que se realizará a más tardar el 15 de junio. Mientras tanto, se hizo un llamado a evitar nuevas manifestaciones y disturbios durante esta semana, mientras se espera que la fiscal Incardona comunique formalmente los acuerdos alcanzados para que sean aprobados judicialmente.

La Salada, una de las ferias de ropa más grandes de Latinoamérica (Thomas Khazki)

La fiscal fue una figura fundamental en este proceso, siendo responsable de investigar la detención de Castillo y determinar las condiciones bajo las cuales la feria podría reabrir. En el escenario de la reunión, también participaron representantes del Ministerio de Seguridad, encabezado por Patricia Bullrich, y entidades de recaudación como ARCA, encargadas de supervisar aspectos fiscales de los feriantes.

El contexto social y económico de La Salada, que alguna vez fue considerada la feria de ropa más grande de Latinoamérica, resalta la compleja realidad de muchos trabajadores cuyos medios de vida dependen enteramente de estas instalaciones. En declaraciones a TN, una de las comerciantes que asistió a la movilización expresó: “Yo tengo puesto en la feria, pago impuestos, tengo a la gente en blanco. Toda la mercadería está adentro y no tenemos solución […] Hay gente que vive del día a día”.

Otra manifestante, dedicada a la venta de café dentro de la feria, compartió la dificultad económica que esta situación representa: “Yo vendo café en la feria y soy pensionada. No me alcanza lo que me paga el gobierno, yo quiero que nos abran las puertas para trabajar, vivimos con eso”.