La suboficial de 21 años, que cursaba un embarazo de ocho meses de gestación, y el pasado 18 de mayo fue baleada en la cabeza por su novio, también policía provincial, fue dada de alta este lunes en el Hospital José María Cullen de Santa Fe. El bebé, que nació prematuro por una cesárea de urgencia a N.A.I., permanece internado en el área de Neonatología, con pronóstico estable. Por su parte, el presunto atacante, Brian Ezequiel Aguirre (23), ya fue imputado y quedó preso por intento de femicidio y de aborto.
El día de la agresión el disparo había dado en la zona frontal de la cabeza de la joven suboficial, que inmediatamente fue trasladada al hospital, donde fue intervenida en dos oportunidades, primero para que nazca el bebé, y luego para descomprimir la presión craneal producto de la herida.
El miércoles pasado, diez días después del ataque, ya había sido pasada a sala general ante una evolución favorable. “El paciente está en neonatología con tratamiento nutricional. Está estable, con evolución favorable”, dijo este lunes Bruno Moroni, director del hospital Cullen, en diálogo con Aire de Santa Fe con respecto al estado de salud del bebé.
El suboficial Aguirre fue acusado ese mismo miércoles de la semana pasada en una audiencia que se celebró en los Tribunales de la capital provincial. El fiscal Alejandro Benítez le atribuyó una tentativa de homicidio triplemente calificado –por relación de pareja, por ser perpetrado por un hombre contra una mujer mediando violencia de género y mediante la utilización de un arma de fuego– y tentativa de aborto.
La posible pena que podría caberle al imputado oscila entre los 10 y los 15 años, según estimó el funcionario del Ministerio Público de la Acusación.
En una segunda audiencia, que se realizó este viernes pasado, el juez Nicolás Falkenberg le dio prisión preventiva efectiva por el plazo de ley al policía, al descartar la versión que brindó el propio agente de que se le había disparado el arma reglamentaria de manera accidental al manipularla en su domicilio de la localidad de Coronda, mientras se cambiaba para ir a Rosario a tomar servicio.
“La víctima vivía con su tío en ese inmueble. El hombre (Aguirre) empuñó su arma reglamentaria, apuntó y disparó un proyectil que impactó en la cabeza de su pareja. Ante el estruendo, el tío de la víctima fue al lugar y, tal como reiteró en la audiencia, el imputado dijo que se le había escapado el disparo”, indicó el fiscal en conferencia de prensa.
Como ya publicó Infobae, Brian Aguirre y su pareja estaban en actividad en la Policía desde finales de febrero. Se les había dado destino en Rosario, dentro de la Brigada de Orden Urbano, una fuerza integrada en su mayoría por binomios de policías caminantes, que tienen por objetivo tareas de prevención en la calle. Él se incorporó a esa dependencia el 22 de febrero pasado y ella, seis días después.
En el caso de la suboficial, desde abril su situación había cambiado, ya que se le habían asignado tareas administrativas por su avanzado embarazo, por lo que estaba sin portación de arma de fuego.
Ante la acusación penal y la orden judicial de quedar detenido, el jefe de Policía de la provincia, Luis Maldonado, pasó a disponibilidad a Aguirre, por lo que cobrará momentáneamente el 75 por ciento de su salario.
