Primer concierto de Maluma en el Movistar Arena de los tres que celebrará en Madrid y que cierra su gira europea (con Lisboa en medio) de ‘+ Pretty, + Dirty’. Vivir un concierto de Maluma en directo es una experiencia que merece la pena ser vivida una vez en la vida: por cómo se desarrolla, por él, por los fans que le veneran, por la atmosfera que se genera…
Anoche, lo del Movistar Arena fue como una experiencia casi religiosa para todos los que estaban allí. Arrancó a las 21:15 horas, con 15 minutos de retraso y con un contador hacia atrás de 10 minutos. Irrumpió como si de un púgil se tratara, subiendo al escenario con un abrigo blanco de pelo y gafas de sol.
Abrió la noche con ‘Borro Cassette’ y ‘El Perdedor’ con los fans enfervorizados. Se despojó del abrigo para mostrarse vestido de granate con camisa y pantalón de cuero mientras entonaba ‘Miss Independent’ y ‘Carnaval’.

“Buenas noches mi gente. Muchas gracias Madrid”, así dio su bienvenida a la capital donde aún tiene dos noches más. A medida que el show avanzaba y cantaba ‘Marinero’, saltó con ‘Vente pa´ca’, encantó con el ‘Chantaje’ de Shakira, entre otras, acabó sin camiseta y con las fans rendidas a su ídolo.
Mensaje contundente
Después de interpretar ‘HP’ y su mítica ‘Felices los cuatro’ lanzó un mensaje reflexivo y que invita a pensar. Una crítica hacia las redes sociales y una invitación a la meditación sobre qué vida estamos viviendo: “Desde que soy padre todo ha cambiado para mí. Soy un hombre nuevo. Las redes sociales son para disfrutarlas, pero no son nuestra vida. No podemos compararnos con los demás. No hay nada más bonito que ser único y auténtico. Si las redes no están para transmitir buen mensaje no se utilizan. Nos engañan. Quiero plantar esa semillita. Que dejemos de compararnos con basura, aprovechemos el presente. Vivimos del pasado y el futuro causa ansiedad, pero hay que ser capaces de vivir el presente. Les pido un favor, en estas dos horas vivamos el presente. Para mí estos conciertos es sanación. La vida es compleja, pero es divina”.
“Si las redes no están para transmitir buen mensaje no se utilizan. Nos engañan”
No dejó de cantar su mítico ‘Hawai’, se quedó sin sonido mientras entonaba ‘Mojando asiento’. El Movistar Arena se quedó mudo temiendo que la noche acabara en tragedia. Pero fue un minuto que Maluma dejó de oírse, que hasta él se lo tomó como una piedra en el camino sin más.
Cambio de escenario
En el tramo final del concierto, cambió de escenario. Apareció al lado de la mesa de mezclas, en la otra punta del principal. Se acercó a los enfervorizados fans que ansiaban tocarlo, sentirle que estaba a su lado. Y así se escuchó ‘Nos comemos vivos’ o ‘Cosas pendientes’ con un Maluma emocionado.