El precio de la canasta de Pascua subió más del 50% este año

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A menos de 20 días de la celebración de Semana Santala Canasta de Pascuas en 2025 registró un incremento promedio del 51,2%, con alzas que superan el 100% en algunos productos. Entre los alimentos que más aumentaron se destacan el atún enlatado, el filet de merluza y los tradicionales huevos de chocolate.

Según un relevamiento realizado por el Instituto de Estudios de Consumo Masivo (Indecom), el producto que registró el mayor aumento fue el atún en lata de 170 gramos, que pasó de costar $2400 a $4900, un incremento del 104,2%. El filet de merluza también experimentó una suba considerable: pasó de $5900 a $9800 por kilo, lo que representa un incremento del 66,1%.

En los comercios, los huevos de chocolate también reflejaron aumentos significativos: el clásico Kinder Sorpresa de 150 gramos escaló un 44,6%, de $14.700 a $21.250; el Milka de 200 gramos pasó de $9990 a $15990 (+60%) y el Bon o Bon de 70 gramos de $5699 a $8499 (+49,1%).

Asimismo, para quienes buscan una opción sofisticada y de alta calidad, Rapanui ofrece huevos de pascua de 360 gramos a $38.000, de 500 gramos a $52.000, de un kilo a $93.000 y el más grande que venden, de tres kilos, a $267.000.

Los precios de las roscas de pascua van desde $9000 hasta $26.000.

El precio de la canasta de Pascua subió más del 50% este año

“Este año se observó una suba promedio mucho más moderada que en 2024, pero igual de preocupante si se consideran los bajos niveles de consumo”, explicó a un medio bonaerense el presidente de Indecom, Miguel Calvete, y agregó que “por el momento, la gente está comparando más y comprando menos”.

“A pesar de que los incrementos son menores a los de años anteriores, los valores de la canasta de Pascuas siguen superando el promedio de inflación mensual, lo que impacta especialmente en quienes buscan mantener las tradiciones familiares”, señaló el directivo.

“El estudio muestra que los consumidores deberán organizar sus compras con antelación, buscar promociones y considerar alternativas más económicas para sostener sus costumbres sin que ello represente una carga económica desproporcionada”, concluyó Calvete.