Javier Milei mas de un año de Gobierno en Argentina y su terapia de choque para reactivar la economía del país, su famosa motosierra, ya está dando resultados porque la inflación está controlada y el déficit público ha desaparecido. Sin embargo, aunque las cuentas están cuadradas, las bondades de la ‘receta Milei’ no acaban de llegar al ciudadano de a pie porque los salarios o el desempleo siguen siendo asignaturas pendientes.
Pero con sus pros y sus contras, los argentinos aprueban la gestión de Milei o, al menos, eso dicen las encuestas. Según la consultora Opina Argentina, el presidente cuenta con un 35% de aprobación después de un año de gobierno y en los mismos parámetros se mueven encuestas realizadas en el último mes por otras consultoras como Aresco, Giacobbe o la Universidad de San Andrés.
La inflación más baja en tres años
Si de algo no se puede acusar a Milei es de haber ocultado la realidad a los argentinos, pues el presidente ya advirtió de que su inyección anarcocapitalista sentaría las bases para la recuperación económica a medio y largo plazo, pero provocaría un empeoramiento de la situación a corto plazo. Y lo cierto es que tras subir al poder, la inflación alcanzó en Argentina un pico del 25,5% en diciembre de 2023, pero rápidamente comenzó a descender hasta alcanzar el 2,7% el pasado mes de octubre, el dato más bajo en los últimos tres años.
Sin embargo, los críticos de Milei recalcan que la inflación interanual se situó en octubre en el 193%, con un aumento del 107% en lo que va de año, lo que mantiene los precios por las nubes. “Hay que romper el relato. El gobierno de Milei en once meses ha acumulado la misma inflación que en los primeros 55 meses del gobierno de Cristina Fernández. En Argentina resulta más caro comprar el diario, un litro de leche, una lata de atún o ir al cine que en países como España”, afirma el economista Alfredo Serrano Mancilla, que fue asesor de Nicolás Maduro en Venezuela y dirige el Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG).
Superávit fiscal a costa de reducir prestaciones sociales
La obsesión de Milei era cuadrar las cuentas del Estado y lo ha conseguido al pasar de un déficit primario del 2,9% del PIB en diciembre de 2023, a un superávit del 1,8% el pasado octubre (diferencia entre ingresos y gastos corrientes del Estado). Teniendo en cuenta el pago de intereses de la deuda, el resultado financiero ha pasado en diez meses de un -6,1% a un +0,5% del PIB.
“Las medidas que adoptamos fueron difíciles e implicaron el esfuerzo de todos los argentinos. Somos conscientes del gran sacrificio que ha hecho el pueblo argentino, pero ya comenzamos a ver resultados tangibles. En estos doce meses hemos demostrado que un cambio de rumbo en Argentina es posible”, declaró hace dos semanas el jefe de gabinete del gobierno argentino, Guillermo Francos.
Ese ‘sacrificio’ también lo impuso Milei en la administración del Estado, reduciendo a la mitad del número de ministerios y cerrando numerosos organismos oficiales.
Reducción del riesgo país
Tras un año de gobierno, Milei ha logrado que el riesgo país de Argentina haya pasado de 1.923 a 760 puntos básicos, una drástica reducción que ha permitido la llegada de más inversores extranjeros y también facilita la financiación del Estado en los mercados internacionales.
Recesión, pero brotes verdes en el horizonte
El PIB de Argentina se contrajo un 3,4% en el primer semestre del año, golpeado, en parte, por las medidas de austeridad impuestas por el gobierno de Milei, que redujo considerablemente la actividad del sector público. Sin embargo, los analistas consideran que la economía ya ha tocado fondo y ha comenzado a recuperarse en el segundo semestre del año. Un informe de BBVA Research prevé que la economía caerá un 4% este 2024, pero contempla una recuperación del 6% para 2025.
Aumenta la tasa de pobreza
Según el Instituto Nacional de Estadística de Argentina (INDEC), la tasa de pobreza aumentó en el primer semestre del año hasta el 52,9% de la población, afectando ya a casi 25 millones de personas, mientras que antes de la victoria de Milei se situaba en el 41,7%. La eliminación de subsidios y prestaciones sociales, así como la reducción de la actividad en el sector público, han golpeado a amplios sectores de la población.
No obstante, un análisis de la Universidad Católica Argentina (ODSA-UCA) refleja que la tasa de pobreza aumentó al 54,8% en el primer trimestre de 2024, pero bajó al 51% en el segundo trimestre y la estimación es que siga reduciéndose.