La suspensión de las PASO porteñas y la nueva fecha para las elecciones (18 de mayo) hizo que todos los tiempos se acorten. Los cierres de alianzas y de listas están a la vuelta de la esquina. Y la decisión de Jorge Macri dejó a la mayoría de los espacios políticos con los pantalones abajo. Nadie tiene candidatos definidos, salvo Unión por la Patria, que muy probablemente lo lleve a Leandro Santoro. En el PRO, suenan el ministro de Seguridad, Waldo Wolff (que tiene que ir a la Legislatura a explicar las fugas de presos) o la flamante vocera Laura Alonso. En La Libertad Avanza, no hay nombres definidos. Algunos piensan en sacrificar alguna figura del gabinete, como el vocero Manuel Adorni (improbable) o bien importar otra figura del PRO, como la exministra de Educación Soledad Acuña. En tanto, el ex jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta anunció que jugará en las elecciones porteñas o en las nacionales, lo que podría complicarle los planes al PRO.
Con la decisión de suspender las PASO porteñas, el Gobierno de la Ciudad informó que se adelantaba la fecha, originalmente prevista para el 6 de julio. Ahora serán el 18 de mayo. Esto hace que el calendario electoral sea inminente: el 19 de marzo ya es el cierre de alianzas y el 29 de marzo, el cierre de listas. Esto implica que hay un mes para definir los candidatos de todos los espacios políticos que, en su mayoría, hoy están en cero.
El 13 de abril comienza la campaña en medios audiovisuales y el 16 de mayo arranca la veda electoral. Se vota el domingo 18 de mayo, fecha a la que es posible llegar casi con un pestañeo de ojos.
Desprevenidos
Esto agarra desprevenidos a casi todos. Inclusive al PRO. En el partido amarillo, que busca defender su bastión de la avanzada de Karina Milei, hay varios nombres circulando pero ninguno está sólido. Unos dicen que puede ser Wolff, pero el ministro de Seguridad no se encuentra pasando por su mejor momento: le vienen pidiendo la renuncia tanto desde el peronismo como desde LLA por la sucesión de fugas de presos de las comisarías porteñas. Patricia Bullrich, desde el ministerio nacional, también lo viene castigando por este tema y dijo que “no se hace cargo de sus presos”:
Otra opción sería la nueva vocera del Gobierno porteño, Laura Alonso. No obstante, sería una decisión al menos llamativa porque Alonso acaba de asumir en ese puesto, y debería dejarlo para encarar una campaña y luego irse a la Legislatura, lugar por el que ya pasó allá lejos y hace tiempo.
Quien seguro estará en la lista es el actual jefe de la bancada Darío Nieto, ex secretario privado de Mauricio Macri, quien lo apalancará para que siga en la Legislatura. Algunos vaticinan que incluso logrará que tenga la cabeza de la lista.
Si en el PRO no hay un candidato cantado, a la Libertad Avanza se le quemaron los papeles. Recién ahora van a comenzar a pensar en nombres, según confirmaron a este diario. No obstante, ya hay algunos circulando: el de Adorni, que se había pensado para las elecciones nacionales es una de las alternativas que se echó a correr, aunque es improbable que Milei quiera separarse de su vocero favorito.
Otra opción que viene circulando es la de sumar a alguna de las personas fugadas del PRO, como podría ser la ex ministra de Educación Soledad Acuña. Su pareja Diego Kravetz abandonó con mucho ruido la gestión porteña y recaló en la SIDE. No sería imposible que la dirigente -que en 2023 vio frustrada la posibilidad de competir por la jefatura de Gobierno- vuelva al ruedo desde el partido violeta.
Entre los dos espacios, todos presumen, se dará una de las contiendas más importantes: la de ver quién se queda con el electorado y si Karina Milei cumple con su objetivo de destronar al PRO en su propio bastión.
El Pelado asoma
Pero no serán los únicos que intervendrán en la elección. Uno que decidió sumarse para terciar es Horacio Rodríguez Larreta. En un extenso tweet anunció que se presentará en las elecciones porteñas o en las nacionales con con su propio espacio, el MAD (Movimiento al Desarrollo). “Lamentablemente, el PRO ha perdido su identidad”, anunció su salida del partido amarillo. “El día que perdés tu identidad, lo perdiste todo. Estuve y estoy en contra de entregar el PRO a Milei, lo dije desde el primer día. Por eso no fui parte de la conducción actual del partido. El PRO debió haber ejercido de forma constructiva su rol como oposición. Para eso nos votaron”, les reprochó.
“Los grandes logros de nuestra gestión se están diluyendo: la ciudad está sucia, sin mantenimiento, volvieron los baches, no se hacen obras y no hay respuestas a los vecinos“, le contó las costillas a la gestión de su sucesor. Sostuvo que hasta gente que no lo votó le dice a diario que su gobierno fue mejor.
“Yo voy a estar, como legislador, como diputado o como senador, para debatir la ciudad que nos merecemos. Por eso, vuelvo”, anunció Larreta. En cualquiera de los dos casos, algún problema le generaría al PRO, pero el más preocupante para Jorge Macri es el de Ciudad. Más si Larreta recupera sus alianzas históricas y consigue sumar a la Coalición Cívica o incluso a los radicales.
La UCR porteña deberá también ver contrareloj qué alquimia arma para no ser aplastada por la polarización entre el PRO y LLA. Lousteau tiene ahí una tarea dificil, incluso si él decide encabezar alguna de las boletas (tanto local como nacional).
La Libertad Avanza, en tanto, puede tener sus propios problemas con la aparición de listas de los que quedaron afuera, como Ramiro Marra o de otros dirigentes como Yamil Santoro o Eugenio Casielles que le pueden robar algunos votos.
En tanto, Unión por la Patria compite con menos complicaciones porque no se le superpone el electorado, como les ocurre al PRO y a LLA. Ahí se perfila la candidatura de Leandro Santoro, aunque también podrían sumarse Mariano Recalde o Juan Manuel Abal Medina. Habrá que ver cuales van a las nacionales y cuales a las elecciones porteñas, que están a la vuelta de la esquina.