En el avión de línea estadounidense que cayó este miércoles a la noche al río Potomac, tras chocar con un helicóptero militar cuando sobrevolaba Washington, viajaba una persona de nacionalidad argentina. Según trascendió, se trata de un hombre que se trasladaba con su hijo, de nacionalidad chilena, que también falleció en el acto. El incidente aéreo no dejó sobrevivientes, confirmó este jueves el presidente estadounidense Donald Trump en una conferencia de prensa desde Casa Blanca.
El argentino que perdió su vida en el siniestro aéreo de este miércoles había abordado el vuelo con su hijo de 13 años en Wichita, Kansas, donde el chico había asistido a una competencia de patinaje artístico.
El hombre, un contador recibido en la Universidad de Buenos Aires que luego continuó sus estudios en Estados Unidos, era vicepresidente de una empresa de energía eléctrica con sede en Arlington, Virginia, muy cerca del aeropuerto donde ocurrió la tragedia, y había vivido varios años en Chile.
Su esposa, también argentina, estaba esperando en el aeropuerto Ronald Reagan que aterrizara el vuelo con su marido y su hijo cuando poco antes de las 21, hora de Washington, se produjo el choque del avion con el helicóptero militar.
Además del argentino y su hijo, viajaban en el avión otros atletas estadounidenses -junto a familiares y entrenadores- vinculados al patinaje artístico, que venían de Wichita (Kansas), donde tuvo lugar entre el 20 y el 26 de enero el Campeonato de Patinaje Artístico de Estados Unidos.
“Estamos devastados por esta tragedia indescriptible y llevamos a las familias de las víctimas en nuestro corazón”, dijo la Federación estadounidense de Patinaje Artístico. Más tarde, el consejero delegado del Club de Patinaje de Boston, Doug Zeghibe, informó que de las 14 víctimas -muchos de ellas adolescentes- vinculadas a la federación, seis pertenecían a su organización.
Entre las víctimas del fatal incidente también había ciudadanos rusos. En la conferencia de prensa que dio este jueves, Trump confirmó que Estados Unidos mantuvo contactos con Rusia para repatriar los cuerpos. “Ya hemos estado en contacto con Rusia y la respuesta es sí, lo facilitaremos (la repatriación)”, dijo el republicano.
“Con mucha tristeza conocimos a través de la Casa Blanca que a bordo del avión (accidentado) había ciudadanos rusos. Agradecemos a las autoridades estadounidenses, con las que mantenemos un contacto permanente, las palabras de apoyo expresadas a las familias de los fallecidos y su disposición a ayudar con el traslado de los cuerpos a la Patria”, publicó, por su parte, la embajada rusa en Estados Unidos, a través de Telegram.
Entre los fallecidos de nacionalidad rusa se encuentran dos renombrados ex patinadores artísticos, Evgenia Shishkova y Vadim Naumov, informó el Kremlin.
Cómo fue el choque
Un avión Bombardier operado por PSA -una filial regional de American Airlines- que transportaba a 60 pasajeros y a cuatro miembros de la tripulación “colisionó a media altura” con un helicóptero militar Sikorsky H-60 este miércoles por la noche, cuando se acercaba para aterrizar en el aeropuerto Ronald Reagan, situado en los límites de Washington y el río Potomac.
El helicóptero era un “Blackhawk”, que puede transportar a 15 personas, aunque en el momento del choque iban tres militares en su interior, según un responsable del ejército estadounidense que no dio más detalles.
Los equipos de emergencia lograron rescatar hasta el momento 28 cuerpos -uno del helicóptero y 27 del avión comercial- del río Potomac. Las bajas temperaturas del agua complican las labores de búsqueda y reducen significativamente las posibilidades de hallar más cuerpos en condiciones reconocibles, admitieron los rescatistas.
Este tragedia se convierte en el peor desastre aéreo en Estados Unidos desde 2009, cuando un avión de Colgan Air se estrelló en Nueva York, dejando 49 muertos.