Romina Mircoli, hija de la fallecida cantante Dulce, rompió el silencio en torno a rumores que han surgido tras el deceso de la icónica cantante. En diálogo con Pati Chapoy para Ventaneando, narró cómo fueron los últimos días de vida de su madre y el motivo por el que no hubo un funeral abierto, decisión controversial que dio pie a diversas teorías en redes sociales y programas televisivos.
Fruto del matrimonio de Dulce con el productor musical Luis Mircoli, Romina fue la única hija de la intérprete y quien estuvo con ella durante sus últimos días de vida. Al recordar la crisis de salud de su madre, Romina dijo que su estado físico se deterioró abruptamente luego de que el cáncer hizo metástasis. “La condición fue empeorando mucho. Una cosa es cuando te cuentan, cuando escuchas lo que es el cáncer y otra cosa es ver cómo se va comiendo a la persona que amas”, indicó.
Pese a que el estado de salud de su madre empeoraba cada día, indicó que, como tal, nunca hubo una despedida entre ellas.
Aclara el porqué su madre no tuvo un funeral abierto
Dulce era considerada un ícono de la música; sin embargo, pese a su peso en la industria y el cariño que le profesaban millones de personas, la familia decidió tener un funeral a puertas cerradas. Esta decisión generó rumores sobre una decisión unilateral tomada por Romina que no respetaba la última voluntad de Dulce.
En ese sentido, Romina Mircoli explicó que su madre siempre tuvo claro que no quería que su público la viera en malas condiciones. Para honrar sus deseos, decidió tener una ceremonia íntima, pues el cáncer había consumido a su madre.
“Mi mamá toda la vida expresó que quería ser enterrada, pero uno lo dice pensando que se va a morir de viejito en su cama. Y la vida, desafortunadamente, nunca sabes que revés te puede lanzar”, dijo Romina, quien explicó que la decisión de hacer un funeral cerrado al público fue consensuada.
“El cáncer deterioró muchísimo a mi mamá. Llegó un momento en el que ella ya no se valía por sí misma. Es devastador ver como una persona que hace un mes estaba de vacaciones, feliz, ahorita sus placeres están tan limitados. La vida prácticamente le había quitado todo”.
Y añadió: “Ella me dijo: ‘Romina, que nadie me vea’. No sé cómo, pero se filtraron fotografías del hospital. Ella tenía mucho miedo de que le fueran a tomar fotos. La funeraria fue muy seria, pero ella tenía mucho miedo de que le tomaran fotos como ella estaba, no era la imagen que por la que había trabajado toda su vida”.
Finalmente, Romina Mircoli lamentó que en medio de la tragedia que la embargaba a ella y a su familia, amigos cercanos de Dulce concedieran entrevistas en las que aseguraban que había una relación distante entre ellas, profundizada por una serie de presuntos abusos cometidos por ella.
