Luego de que el vocero presidencial, Manuel Adorni, anunciara a través de una conferencia de prensa que la Argentina comenzará a cobrarle a los extranjeros por la atención médica, el gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, expresó públicamente su respaldo a la medida y comentó que en su provincia, que la aplicó tiempo atrás, funcionó.
Durante su discurso en la toma de juramento a los nuevos miembros del gabinete provincial, Sáenz sostuvo: “Quiero celebrar que el gobierno nacional pretenda llevar adelante una medida que nosotros tomamos hace 10 meses: la de cobrarle a los extranjeros el servicio de salud. Y no lo hicimos por una cuestión caprichosa, ni mucho menos, sino porque en todas partes del mundo nos cobran a cualquiera de nosotros y hasta no te atienden si te estás muriendo en la puerta de algún extranjero. Nosotros no hacemos eso porque, si hay algo que caracteriza al salteño es la humanidad y calidez por sobre todas las cosas”.
Además, continuó: “Empezamos a cobrarles y cayó un 95% la atención de los extranjeros en nuestra provincia, lo que permitió un ahorro importante que va a permitir que los próximos días tengamos 14 ambulancias nuevas, y estamos llamando para comprar 20 más para repartirlas y distribuirlas en todos los rincones de la provincia”.
El gobernador afirmó que el pago del servicio en hospitales públicos a los no residentes benefició a Salta, permitiéndole tener más camas a los locales que antes estaban ocupadas. “Nos enorgullece y celebramos que a nivel nacional se lleve a cabo esto porque es necesario hacerlo. Es por ahí donde hay que recortar los gastos y optimizarlos, no por los lugares más sensibles, ni con los más desprotegidos”, señaló.
Desde el Gobierno comunicaron que se modificará la ley de Migraciones para endurecer los criterios de residencia solicitadas por inmigrantes, con el objetivo de limitar la gratuidad de la atención médica para extranjeros en los hospitales públicos. Además, anticiparon la implementación de un arancel para estudiantes extranjeros no residentes en las universidades.
“Vamos a disponer el fin de la gratuidad de la atención médica para extranjeros. Los organismos determinarán las condiciones para el acceso al sistema. Desde que se tomó una medida similar en Salta, bajó al 95% la atención extranjera y se generó un ahorro de 60 millones de pesos. Esto no solo implica ahorro fiscal si no también una mejor atención para nuestros ciudadanos. Nos despedimos de los famosos tours sanitarios tan conocidos acá”, dijo el portavoz.
De todas formas, la medida tendría un alcance limitado: el arancelamiento de la salud para los no residentes será una decisión de cada provincia y la Nación lo podría hacer solo obligatorio en los hospitales que están bajo su órbita. Además del Garrahan, que la Nación comparte en un 80% con la Ciudad de Buenos Aires, el Ministerio de Salud financia el Hospital de Alta Complejidad de El Calafate (Santa Cruz), el Hospital Posadas (Morón), el Hospital de Alta Complejidad en Red El Cruce (Florencio Varela), el Hospital Baldomero Sommer (General Rodríguez), el Hospital de Cuenca Alta Néstor Kirchner (Cañuelas), el Hospital de Alta Complejidad Del Bicentenario (Esteban Echeverría), el Hospital Nacional y de Comunidad Ramón Carrillo (antes, Colonia Montes De Oca), el Hospital René Favaloro (La Matanza) y el Hospital en Red Especializado en Salud Mental y Adicciones Laura Bonaparte (ciudad de Buenos Aires).
Salta se convirtió en marzo en la primera provincia argentina en cobrar la atención médica que no sea de emergencia a los extranjeros. En su implementación, el gobierno salteño dispuso que los valores se rijan en base al nomenclador de la obra social local, el Instituto Provincial de Salud (IPS), que van desde $5000 una consulta a $250.000 por un día en cama de terapia.