Este jueves se celebró el sorteo del Mundial de Clubes, a disputarse del 13 de junio al 15 de julio de 2025 en los Estados Unidos. En la previa a este momento, donde se conoció cómo quedó conformado cada grupo y qué rivales les toca a River y a Boca, un cruce verbal entre Oscar Ruggeri y Diego Latorre llenó de tensión el estudio de ESPN.
Ambos panelistas de F90 se cruzaron al aire por tener diferentes versiones de cómo afrontar el Mundial de Clubes. Quien encendió la mecha fue Ruggeri, al seguirle el juego a Sebastián “Pollo” Vignolo. “Estoy esperando el sorteo, me encanta que los jugadores digan ‘quiero vacaciones’… ¡Qué vacaciones! Me hubiese encantado jugar este Mundial”, lanzó el exjugador de la selección argentina.
Quien no hizo oídos sordos a esta declaración fue Latorre, quien argumentó que los futbolistas padecen los calendarios atestados de partidos y se mostró en contra de esta competición internacional. “Pero Cabezón, los jugadores y técnicos piden a gritos vacaciones”, lanzó.
Con intenciones opuestas, Ruggeri desestimó el reclamo de su compañero y atacó: “Dejate de joder, Gambeta. Mirá vos, ¿hace cuánto no jugás? A los 36 dejamos de jugar, éramos todos pibes y nos retiramos. Dale que son 10 ó 15 años buenos la carrera”.
Prendido al ida y vuelta, Latorre citó a Rodri, jugador del Manchester City, y a Jürgen Klopp, extécnico del Liverpool, como exponentes de un reclamo de reducir las cargas de compromisos deportivos. “Son 10 años buenos nomás, métanle con todo, si esto es lo más lindo que hay, imagínate lo lindo que sería estar concentrado para jugar el Mundial de Clubes”, manifestó Ruggeri.
Sin claudicar en su reclamo, Latorre siguió: “Para ser competitivo tenés que estar sano. Una de las patas del rendimiento deportivo es el descanso, las vacaciones”. Sin filtros, el campeón del mundo con la selección argentina, retrucó: “Las vacaciones las tenemos desde que dejamos de jugar, estamos sin hacer nada”.
Con dos posiciones bien marcadas, el exjugador de Boca y Racing añadió que el negocio del fútbol “está atropellando todo” y enfureció a Ruggeri: “¿Qué negocio? Esto es maravilloso. ¿Qué van a hablar los jugadores si les gusta esto?”.