El director James Mangold vuelve al cine biográfico con un proyecto audaz que aborda los primeros años de Bob Dylan, nada menos, en una película titulada A Complete Unknown (Un completo desconocido). Programada para estrenarse el 25 de diciembre en Estados Unidos (en la región recién se verá en febrero) el filme se enfoca en la etapa más decisiva de la carrera del cantautor de Minnesota: sus años iniciales en Nueva York, entre 1961 y 1965.
El filme, protagonizado por el nuevo chico maravilla de Hollywood, Timothée Chalamet como el joven Dylan, muestra cómo el cantante se adentró en la escena folk de Nueva York para alcanzar rápidamente una influencia masiva en la música y la cultura de los años 60. La narración de este período, cuyo guion fue coescrito por Mangold y el guionista Jay Cocks, se inspira en el libro de Elijah Wald, Dylan Goes Electric!, que explora la transformación radical de Dylan al pasarse del folk al rock. El acto fundacional del cambio sucedió en una actuación, tan memorable como polémica, en el Newport Folk Festival de 1965.
Para llevar a la pantalla esta historia, el cineasta se apoya en un reparto de figuras reconocidas como Edward Norton, Elle Fanning y Nick Offerman, quienes interpretan papeles que enriquecen el contexto social y musical en torno a Dylan.
El ícono del rock como una fábula
El director estadounidense, conocido por su capacidad para dar vida a historias complejas, reveló que uno de sus principales intereses en dirigir A Complete Unknown fue la oportunidad de contar la historia de Bob Dylan como una “fábula”.
Según Mangold, le atrajo especialmente la figura de un joven Dylan, de 19 años, que llega a Nueva York con apenas unos dólares en busca de su héroe Woody Guthrie (Norton) y trata de abrirse camino dentro del movimiento folk.
“Es un Dylan que está dejando atrás todo lo que conocía: se está reinventando. Hace nuevos amigos, toma control de una comunidad y, cuando esa misma comunidad empieza a asfixiarlo, también la abandona”, dice el cineasta en la revista británica Mojo. Y agrega que fue esa visión de “Dylan como un personaje en constante transformación” la que lo convenció de encarar el proyecto.
Cuenta Mangold que, en su primera conversación con Dylan, el cantante le preguntó directamente de qué trataría la película:
-Es sobre un chico que escapa y se reinventa en la gran ciudad -respondió.
Y que Dylan sonrió y le dijo que esa interpretación era acertada.
Chalamet habla, piensa y canta como Dylan
La elección del protagonista de A Complete Unknown fue, para Mangold, un proceso claro y directo. Desde 2020, el director vio en Timothée Chalamet el perfil ideal para interpretar a Bob Dylan en sus años de juventud. A la hora de definirlo, dice que “es un actor increíblemente agudo, ingenioso y ambicioso, con una personalidad peculiar y carismática”.
A pesar de los retrasos en la producción causados por la pandemia y otros compromisos de Mangold, la decisión de mantener al actor francoestadounidense en el rol se mantuvo firme. Según el director, el protagonista de Wonka siempre “mostró una disposición y un hambre particular por asumir un papel de tal complejidad”, además de poseer ciertas cualidades que consideraba esenciales para encarnar al Dylan de esa época.
Otro aspecto clave fue la decisión de que Chalamet interpretara las canciones de Dylan en la película. Para Mangold, esta autenticidad vocal era indispensable, ya que en el folk la conexión emocional y la autenticidad son pilares. Según el director, “usar grabaciones en lugar de la voz del actor habría despojado al personaje de esa conexión genuina con la música”, le dijo a Mojo; un riesgo que el director estadounidense prefirió evitar para mantener la integridad de la actuación.
La influencia del “Amadeus” de Milos Forman
El cineasta subrayó que A Complete Unknown no debe considerarse una biografía tradicional de Bob Dylan. En lugar de eso, su enfoque se centra en capturar un “momento” específico: los cinco años entre la llegada de Dylan a Nueva York en 1961 y su controversial transición al sonido eléctrico en el Festival de Newport de 1965.
Según Mangold, al narrar esta etapa temprana y menos explorada de Dylan, se permitía mayor libertad creativa, evitando la saturación de la iconografía ampliamente conocida del Dylan más maduro, el cual ya fue retratado en múltiples documentales y libros.
Mangold reconoce además la influencia de la película Amadeus de Miloš Forman en su visión para A Complete Unknown. Al igual que en Amadeus, donde el genio de Mozart afecta profundamente a quienes lo rodean, el aclamado director quiso que la presencia de Dylan en la película tuviera un impacto similar sobre los personajes secundarios. Este enfoque permite que el público vea cómo el talento y la evolución artística de Dylan influyeron y desafiaron a las figuras de su entorno, una perspectiva que James considera esencial para la historia.