¿Es posible la amistad sincera entre hombres y mujeres? esto dicen los expertos

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El vínculo amistoso entre hombres y mujeres sigue siendo un tema que genera opiniones divididas. Mientras algunos consideran que estas relaciones son enriquecedoras y necesarias, otros creen que están destinadas a complicarse por la posibilidad de atracción física o emocional. Este debate, ampliamente explorado en el cine y la literatura, plantea una pregunta esencial: ¿puede una amistad entre géneros opuestos ser completamente sincera y libre de conflictos?

Para la psicóloga Madeli Santos, la sociedad suele complicar estas relaciones al asociarlas con expectativas románticas o sexuales. Según explicó, en una sociedad donde el apego y el sexo suelen verse con complejidad, a veces parece imposible imaginar una amistad entre géneros opuestos sin una expectativa romántica o sexual de por medio. Sin embargo, Santos resalta que estas amistades pueden romper estereotipos de género y fomentar una comprensión más profunda entre las personas.

La sociedad suele asociar la amistad entre el hombre y la mujer con una atracción sexual o romántica no resuelta (imagen ilustrativa)

Por su parte, la psicoterapeuta Fanny Abanto Casavalente asegura que las amistades entre hombres y mujeres contribuyen a construir relaciones más diversas e inclusivas. En ese sentido destacó que “aunque la percepción sobre la amistad entre hombres y mujeres cambió a lo largo de los años, aún persiste la idea de que este tipo de vínculo no es posible o adecuado”. También mencionó que estos vínculos se valoran por su aporte emocional y por desafiar roles tradicionales de género.

Patricia Cortijo, neuropsicóloga de la Clínica Internacional, señaló que las diferencias entre géneros influyen en la forma de experimentar las amistades. Mientras los hombres suelen enfocarse en actividades compartidas, las mujeres priorizan la comunicación emocional. No obstante, valores como la madurez emocional y la capacidad de establecer límites claros son esenciales para construir una relación amistosa genuina. “A todo esto también es importante añadir un cambio interno en cuanto al entendimiento del amor y el ejercicio del mismo, el cual incluye un trabajo de sanación personal a nivel emocional y sexual”, puntualizó Santos.

Expectativas y prejuicios culturales

Las normas sociales y los medios de comunicación perpetuaron la creencia de que una amistad entre hombres y mujeres necesariamente evolucionará hacia una relación romántica. Según Abanto, “si bien este supuesto se debe a la influencia de normas sociales que asocian las relaciones entre hombres y mujeres con la atracción romántica, los medios de comunicación también tienden a representar estas amistades como preludio de romance, reforzando así la idea de que no pueden ser ‘solo’ amigos”.

Esta percepción, además de estar influida por historias reales de amistades que se transforman en relaciones, puede limitar la posibilidad de establecer vínculos basados únicamente en el respeto y la empatía. Al romper con estos estereotipos, las personas pueden crear relaciones más auténticas, libres de expectativas impuestas.

Las normas sociales y los medios de comunicación perpetuaron la creencia de que la amistad entre un hombre y una mujer evolucionará hacia una relación romántica (imagen ilustrativa)

Factores psicológicos y beneficios

La amistad, fundamentada en la confianza y el respeto mutuo, puede florecer entre hombres y mujeres siempre que exista madurez emocional. Según Cortijo, algunos factores claves para garantizar una amistad sincera incluyen:

  • Establecer límites claros. Esto evita malentendidos y asegura que ambas partes entiendan la naturaleza de la relación.
  • Compartir principios similares. Este aspecto fortalece el entendimiento mutuo y fomenta la conexión emocional.
  • Autoestima saludable. Permite que las personas se sientan valoradas dentro de la relación.
  • Apertura emocional. Favorece la disposición para compartir experiencias y sentimientos personales.
  • Inteligencia emocional. Es indispensable para gestionar las emociones propias y ajenas.

Sobre los beneficios de estas relaciones, Abanto mencionó que promueven la empatía y la tolerancia, mientras amplían el círculo social de las personas y desafían los estereotipos. Además, las amistades intergénero ofrecen una dinámica menos conflictiva y más complementaria. Santos agregó que “estas relaciones brindan un espacio para expresar aspectos de nuestra personalidad que, en contextos homogéneos, podrían quedar en segundo plano”.

Psicólogos xplican si es posible la amistad entre el hombre y la mujer

Límites para una relación saludable

Cuando se presentan sentimientos románticos en una amistad, es importante manejarlos con sensibilidad para evitar conflictos emocionales. Según Abanto, los pasos recomendados en estas situaciones son:

  • Reconocer los sentimientos y ser honesto consigo mismo.
  • Reflexionar sobre el origen de estos sentimientos románticos y cómo están afectando la amistad. Esto incluye cuestionarse: “¿Cómo surgió esta atracción?”
  • Considerar si los sentimientos son recíprocos. Si lo son, evaluar si una relación romántica sería viable sin dañar la amistad existente.
  • Expresar los sentimientos de manera asertiva y respetuosa.
  • Escuchar las opiniones del otro, entendiendo que puede necesitar tiempo para procesar la situación.

Cuando se presentan sentimientos románticos en una amistad, es importante manejarlos con sensibilidad para evitar conflictos emocionales (imagen ilustrativa)

“Si los sentimientos no son recíprocos, establecer límites claros es esencial para evitar confusión y proteger la amistad. Es fundamental recordar que, si esta situación se torna difícil de manejar, siempre será una buena opción buscar y recibir orientación y apoyo emocional por parte de un psicoterapeuta especializado”, sugirió Abanto.

Recomendaciones para mantener una amistad saludable

Como toda relación humana, el vínculo entre hombres y mujeres debe ser cuidado y respetado. Por eso los especialistas brindan algunos tips para que la amistad perdure en el tiempo. Entre ellos se encuentran:

  • Comunicación abierta. Hablar honestamente sobre expectativas y límites desde el principio.
  • Respeto mutuo. Evitar comportamientos que puedan malinterpretarse.
  • Espacio personal. Equilibrar el tiempo compartido y el individual.
  • Claridad en las intenciones. Ser claro sobre la naturaleza de la relación.
  • Evitar situaciones comprometedoras. Ser consciente de cómo ciertas acciones pueden ser malinterpretadas.

*Por Milenka Duarte