El fallo de la Cámara Federal de Casación que confirmó la condena contra Cristina Kirchner casi no ve la luz por problemas técnicos con los servidores de internet del Poder Judicial. A las dos de la madrugada recién se pudo solucionar y subir la sentencia, que tiene más de 1500 páginas, dijeron fuentes judiciales.
No fue la única nota de color que dejó la audiencia de esta mañana, que significó otro revés judicial para la expresidenta. Los jueces cuidaron los detalles de la “puesta en escena” de la lectura del fallo.
Vialidad | Quiénes son los tres jueces que confirmaron la condena contra Cristina Kirchner
Acordaron los tres vestir trajes azul marino, camisa blanca y corbata azul. Los tres estaban engamados y la elección del color no fue casual: la psicología tiene estudiado que el azul es un color que transmite confianza, confiabilidad y esa fue la intención de los magistrados al elegir este atuendo.
El único que apenas desentonó fue el juez Hornos, presidente de la sala y que leyó la minuta con la resolución. Si bien la corbata era azul marino, le sumó unas rayas diagonales blancas.
Los tres jueces, además, lucieron en la solapa izquierda del saco azul marino, un pin. Los tres el mismo, con el escudo del Poder Judicial y la leyenda Cámara Federal de Casación Penal, que mandó a fabricar el juez Mariano Borinsky cuando asumió como presidente del tribunal.
La audiencia fue brevísima, duró apenas 8 minutos. Hornos llevó la voz cantante y por momentos se aprtó del texto escrito para remarcar que se llegaba a esta instancia luego de audiencias “orales y públicas” donde las defensas tuvieron la posibilidad “amplia” de exponer sus argumentos.
Al finalizar dio los buenos días, pero volvió sobre sus pasos y remarcó “la audiencia ha terminado” para que quedara constancia en la grabación en video que se realizó del acto.
Entre el público de la pequeña sala había periodistas, empleados judiciales y en la primera fila allegados a los imputados. El único de los acusados que estuvo presente fue el exsubsecretario de Obras Públicas Abel Fatala, que fue absuelto.
Cuando se leyó el fallo que lo liberaba de responsabilidad, se contuvo para celebrar. Aunque en su interior tenía el mismo entusiasmo que demostró al ingresar a la sala de audiencia, con la casi certeza de que se libraba de esta acusación,
El fical Mario Villar estaba con sus colaboradores sentado a la derecha del tribunal, y los abogados de los condenados y absueltos estaban sentados a la izquierda del tribunal.
Estuvieron los abogados Maximiliano Rusconi y Gabriel Palmeiro, de Julio De Vido, que también fue absuelto, pero estuvo ausente. Prefirió quedarse en su chacra de Zárate.
No estuvieron los abogados de Cristina Kirchner, que presentaron un escrito explicando su ausencia y haciendo reserva del caso para ir con un recurso extraordinario ante la Corte Suprema de Justicia. Tampoco los abogados de Lázaro Báez, otro de los condenados que se notificaron de manera electrónica de la sentencia.