El Gobierno de Argentina no está dispuesto a ceder en la premisa de respetar el equilibrio fiscal que contempla el Presupuesto para 2025, las primeras cuentas públicas de Javier Milei desde que este asumió el cargo de presidente hace más de diez meses.
Así lo ha reiterado este martes el portavoz del Ejecutivo, Manuel Adorni, en su habitual conferencia de prensa, en la que ha valorado como «innegociable» que se respete el equilibrio fiscal, que es la columna vertebral de su acción gubernamental.
De esta forma, si bien ha señalado que tienen «muchas ganas» de contar con el «importante» presupuesto de 2025, Adorni ha reconocido que se puede seguir gobernando sin la aprobación de las cuentas públicas, en una clara referencia a las dificultades que está teniendo Milei para alcanzar un acuerdo en el seno de la Cámara de Diputados, donde su partido no cuenta con mayoría parlamentaria.
En la presentación de las cuentas públicas, Milei aseguró que Argentina contaría por primera vez con un reparto de los ingresos y los gastos del Estado que obedecería a un juego de equilibrio fiscal. A partir de ahora, el equilibrio fiscal va a ser norma no solo por el Presupuesto 2025, sino para todo lo que venga en la Argentina, agregó Adorni.
El texto presupuestario se enmarca en un cuadro macroeconómico en el que la inflación promedio será del 18% y el Producto Interior Bruto (PIB) crecerá un 5%.
«Es un problema del Congreso si no lo quiere aprobar», sostuvo el mandatario en una entrevista televisiva a mediados de este mes. En dicha entrevista, Milei afirmaba que no estaba preocupado por esta situación. Si bien se ha mostrado partidario de dialogar con otras fuerzas para lograr luz verde para las que serán sus primeras cuentas públicas, el presidente tiene varias líneas rojas que son infranqueables.
Entre ellas se encuentra el déficit cero, uno de los ejes vertebrales del presupuesto de 2025 y de las banderas económicas de Milei. «El déficit cero no se negocia», sentenció este mismo mes.