En medio de la fuerte disputa en el peronismo por su futura conducción y, tras el reciente “Día de la Lealtad”, el Gobierno libertario enviará a defender el Presupuesto 2025, cuyo tratamiento avanza en Diputados, al otrora multi funcionario kirchnerista y actual secretario de Turismo, Ambiente y Deportes, Daniel Scioli.
La visita de Scioli está agendada para mañana, de 18 a 20.30. Antes, de 15 a 17.30, será el turno de la secretaria Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia, Yanina Nano Lembo, quien maneja un área delicada del Ministerio de Capital Humano, que lidera por Sandra Pettovello.
El Presupuesto 2025 ya tiene una clave para que se sancione en el Congreso, como contó Infobae el último fin de semana: varios bloques de la oposición “dialoguista” en Diputados y el Senado demandan un “corsé” para que la Casa Rosada no pueda aprovechar diferencias multimillonarias entre lo que se apruebe en una eventual ley y lo que, de manera potencial, quede liberado para que redireccione a gusto el Ejecutivo.
Un negociador que participa de las charlas paralelas entre La Libertad Avanza y los dialoguistas explicó a este medio: “Estamos en una situación complicada. El mercado espera una ley y sería muy delicado regalarle una nueva prórroga al Ejecutivo. Se van a sentar en una montaña de plata en pleno año electoral. Por eso queremos encorsetar entre lo que prevé el oficialismo y lo que, en principio, pasaría. De esa forma, quizá consigamos algo para lo que sea, llámese obra pública, universidades”.
Desde un despacho legislativo coincidieron con dicho panorama e incluso agregaron: “Vamos a imaginar que se limite la potestad del Ejecutivo si sobra plata en el Presupuesto 2025. Si nos ponemos muy puristas con ese tema, le regalamos la ventaja para que baje más impuestos y le quede toda la ganancia para el Presidente. Ya nos salieron mal las últimas jugadas para insistir ante los vetos. Hay que pensar bien los próximos movimientos”.
Al consultar a generales libertarios sobre lo que quiere la oposición para el Presupuesto 2025, la frase de un legislador top fue contundente. “Se cansaron de pedir un plan de gastos. ¿Ahora lo van a rechazar? ¿Nos van a regalar ese tremendo relato si no dejan sin eso para atemorizar al mercado y desestabilizarnos? ¡Genial!”, enfatizó a Infobae.
Bajo este panorama, la comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara baja, que preside el libertario José Luis Espert, continuará con las disertaciones de funcionarios mientras negocia -en simultáneo- con el Senado para arribar a un dictamen consensuado y con los votos necesarios para que la ley de gastos sea sancionada en el Congreso.
En Diputados también habrá debates sobre indemnizaciones, juicios por jurados, régimen penal juvenil y las potenciales modificaciones a la ley que regula los Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU). Es una norma que impulsó Cristina Kirchner como senadora en 2006 que disfrutaron los gobiernos cristinistas, macristas y el libertario actual.
La inconveniencia que ahora, como Javier Milei le encontró el gusto a los DNU para vetar normas e impedir una agenda paralela que dinamitaría el déficit fiscal cero, la oposición quiere cambiarla y recortar sus “beneficios”, tras dos sesiones pedidas con premura para insistir con leyes que mejoraban la situación de jubilados y universidades y que, en el fondo, derivaron en un mega papelón de la política tradicional en su conjunto. Es que, de manera insólita, los supuestos expertos parlamentarios quisieron aprovechar una debilidad oficialista y fueron al recinto sin respetar el primer mandamiento legislativo: tener el número.
A la espera de una definición sobre el Presupuesto 2025 en la Cámara baja, el Senado tiene -por ahora- una agenda más light para la corriente semana, pese a que piensa una sesión para el jueves 31 del corriente mes. Por caso, pasado mañana se avanzaría con convenios internacionales de diverso índole que ya cuentan con el aval de Diputados. Aún no fue confirmado un nuevo plenario de las comisiones de Seguridad; y de Justicia y Asuntos Penales para dictaminar la ley anti mafias, y un nuevo programa de registro y entrega voluntaria de armas.
