La Argentina se embarcó desde mediados de marzo en una nueva campaña limonera, que por desgracia no se viene desarrollando conforme a lo esperado. Las importantes lluvias registradas durante las últimas semanas están demorando la cosecha y el sector teme el impacto que eso tendrá tanto en la industrialización como en la exportación de fruta fresca.
El balance de ACNOA
Pablo Padilla, presidente de Asociación Citrícola del Noroeste Argentino, habló de la actualidad del sector. “La fruta fresca tiene varios momentos de mercado y si bien se batió récord de exportación a Estados Unidos, los precios no están siendo los que se esperaban”.
“Hay citrícolas y productores primarios que la están pasando realmente mal, lo que genera un achicamiento en la actividad. Hoy el sector, en su gran mayoría no está invirtiendo y trata de subsistir”, sostuvo.
Valoran el apoyo del gobierno provincial
Al mismo tiempo, destacó el apoyo del Ejecutivo Provincial en esta “crisis”. “El gobierno de la provincia nos viene acompañando con una emergencia citrícola, la cual se vence en los próximos días y seguramente esta semana pediremos reunión con el gobernador o el ministro de Economía para una extensión o un nuevo dictado de emergencia“.
“Son paliativos muy valorados por el sector pero no resuelven los problemas de fondo que es la falta de rentabilidad y de ingresos necesarios para que la actividad mantenga el vigor que supo tener años atrás”, cerró.